VACACIONES. Qué hacer para que los chicos no se aburran
María Laura Lezaeta, psicóloga infantil y cofundadora del juego logia, abordó un tema de preocupación de muchos padres de la provincia de Tierra del Fuego cuando llega el período de verano, y es saber qué se debe hacer para evitar el aburrimiento de los más chicos.
Transcurriendo a pleno el periodo vacacional, la psicóloga infantil María Laura Lezaeta abordó la preocupación parental sobre cómo mantener entretenidos a los niños en Tierra del Fuego.
Primeramente, Lezaeta, por FM Master’s, definió que “es uno de los grandes interrogantes en las familias, qué hacer ahora que los chicos cuentan con más tiempo, más disponibilidad horaria”.
Enfatizó la necesidad de mantener ciertas rutinas, incluso cuando los niños no asisten a la escuela: “Es importante establecer ciertos horarios, ciertas rutinas, en cuanto a en qué momento van a tener tiempo para jugar, en qué otros momentos es importante que compartamos tiempo con ellos, tiempo en familia”.
Lezaeta subrayó la importancia de anticiparse al periodo vacacional y estructurar un cronograma familiar: “Los chicos necesitan de cierta organización. Nuestro cerebro necesita cierta estructura, porque eso brinda seguridad y confianza cuando los chicos saben lo que tienen que hacer”.
Frente al aburrimiento, la psicóloga sugirió no temer a la falta de estímulos externos como teléfonos o televisión. Reconoció que “el aburrimiento es parte de la infancia” y aconsejó a los padres reconocer y comprender sus emociones antes de intervenir.
La psicóloga propuso proporcionar herramientas a los niños según sus intereses, “alcanzarles ciertos elementos a partir de los intereses y gustos de ellos”. Invitó a reflexionar y compartir experiencias, fomentando la creatividad, como cuando los padres años atrás “teníamos que apelar a la creatividad en esos momentos”.
El desafío radica en anticiparse al aburrimiento de forma estructurada, “armar con ellos en las vacaciones. Preguntarles cuáles son sus hobbies, qué les gustaría hacer”. También destacó la importancia de entender que la frustración es parte de la vida y ofrece alternativas para acompañar a los niños cuando sus planes no se materializan.
