CASO REGUEIRO. Denuncian represalia laboral y abuso de poder

Sandra Esperón, referente sindical de Ushuaia, brindó su apoyo a Valeria Regueiro, sindicalista de los organismos de control cuya designación gremial fue revocada. Denunció represalia laboral, y pidió acciones concretas en defensa de los derechos laborales.

La referente histórica del sindicalismo fueguino, Sandra Esperón, respaldó a Valeria Regueiro, secretaria General de la seccional Tierra del Fuego de la Asociación del Personal de Organismos de Control (APOC), cuya designación como secretaria Privada del Cuerpo Plenario de Miembros fue revocada por las autoridades de la Sindicatura General Municipal de Ushuaia.

“Siempre tengo contacto con Valeria, nos conocemos hace tiempo y, obviamente, me solidarizo con lo que está pasando”, afirmó Esperón por radio Provincia, enfatizando la importancia de su apoyo.

Esperón destacó que estas situaciones, lamentablemente, no son aisladas y subrayó la necesidad de abordarlas de manera efectiva: “Obviamente que entendemos que estas situaciones pasan y van a seguir pasando en la medida que no le demos un corte real y definitivo. La compañera está haciendo una función gremial, es secretaria de un sindicato elegida por sus compañeros como lo dice la ley y amparada en las consignas sindicales y en las coberturas sindicales. Por lo tanto, independientemente de la situación de revista que ella tenga, ella está ocupando un cargo gremial y no se le pueden cambiar sus condiciones laborales”.

La activa dirigente gremial consideró que el cambio en la situación laboral de Regueiro es una represalia directa por su activismo sindical y laboral: “Lo que a ella le ha sucedido es en función del trabajo gremial que ha estado haciendo. Si un compañero o una compañera está cumpliendo una función durante determinada cantidad de años y, de repente, se le cambian sus condiciones laborales y en el medio estaba cumpliendo la función gremial con un cuestionamiento y con un reclamo en su lugar de trabajo, donde ella representa a los trabajadores y trabajadores, es, nada más y nada menos, que una represalia sindical hacia su labor”.

Sandra Esperón también hizo un llamado a la acción para las organizaciones sindicales locales: “Esto no puede quedar en la nada, y aquellos que dicen representar a los trabajadores, como en este caso de la CGT, tienen que actuar en consecuencia”.

La referente sindical cuestionó la falta de transparencia en estas acciones y la urgencia de abordar situaciones similares en todo el país: “Es difícil comprender qué estamos defendiendo cuando representamos a trabajadores y a trabajadoras. Lo primero que tenemos que dilucidar es si la compañera estaba cumpliendo una función gremial, y a partir de allí si tiene un cambio en su situación laboral, es una represalia”.

Finalmente, Sandra Esperón señaló la importancia de cambiar estas prácticas y respaldar a quienes alzan la voz: “Esto se tiene que resolver, y realmente creo que hay muchas cuestiones acá en Tierra del Fuego que tienen que cambiar. Nosotros queremos a las mujeres que piensan lo mismo que el político, nosotros defendemos a las mujeres que son del palo, nosotras vamos a ir a pelear por las mujeres si son del mismo partido. Pero si vos no sos del partido, si no sos del palo, si no andas con una fotito del funcionario de turno en la solapa, pasan estas cosas”.