¿Hasta dónde va a crecer el basural de Ushuaia?
El relleno sanitario de la capital fueguina se incrementa en dimensiones abruptas y de manera descontrolada. Ubicado en la entrada norte a la ciudad, se encuentra alarmantemente excedido en altura, pegado al curso del Río Olivia y sin ningún tipo de tratamiento de residuos. Una problemática que data desde hace más de una década sin solución hasta que no se concrete la ampliación del ejido urbano.
El crecimiento de las dimensiones del basural de Ushuaia es alarmante, descontrolado y supera ampliamente los máximos autorizados. Si bien el relleno sanitario de la capital de Tierra del Fuego se encuentra por fuera del ejido urbano, está ubicado en la entrada norte a la ciudad, pegado al curso del Río Olivia que desemboca en el Canal Beagle.
En 2011 se planteó la necesidad relocalizarlo por el impacto ambiental que genera debido a la cercanía con la ciudad, en donde no existe hasta el momento una planta de tratamiento de residuos.
Lejos de reubicarlo, el relleno sanitario siguió en el mismo lugar y creciendo en volumen sin control por falta de espacios dentro de la ciudad.
Además de su ubicación, el problema más preocupante del basural de Ushuaia es que resulta superficialmente más extenso de lo que debería. Así, la alta necesidad de espacio de acuerdo al volumen de residuos tratados hace que el proceso de rellenado resulte más rápido de lo previsto, lo que significa un temprano agotamiento del reservorio previsto.
Así, se agrava el problema por la poca disponibilidad de espacios físicos adecuados para este tipo de manejo bajo parámetros de seguridad ambiental adecuada.
Otra problemática es la de los productos potencialmente reciclables como el cartón y el poliestireno expandido, subproductos de las fábricas, que no pueden ser reciclados por no haber un mercado o por no formar una masa crítica que justifique económicamente su elaboración.
Tampoco pueden ser enviados a otros centros fabriles del continente debido a las características de la Ley 19.640 por la que fueron introducidos a la Isla.
Cronología de la desidia: la basura, “abajo de la alfombra”
En abril de 2017, tras múltiples pedidos de informe sobre la situación del basural, se reconoció el colapso del predio, a la vez que se aseguró que “se estaba desarrollando un plan de manejo de residuos que resolvería la situación con nuevas políticas de reciclaje que minimizaría la cantidad de residuos”.
Sin embargo, nada de eso ocurrió. En 2018 se insistió en un nuevo pedido de informe sobre la altura de las celdas del relleno sanitario y la forma en que estaban siendo utilizadas, presentado en un proyecto de Ley impulsado por el bloque de legisladores fueguinos de la UCR.
Dicho año, el entonces coordinador de Medio Ambiente municipal, Hugo Ponzo, aseguró que “el relleno sanitario había llegado a un tope y debía pararse”, por lo que se trabajaba en la ampliación del mismo.
“Estamos en la habilitación de una parcela para que se comience a usar ese espacio en dos hectáreas y media. Estas hectáreas nos darían cinco años más de vida pero el lugar ha llegado a su límite”, había asegurado Ponzo.
Ante la falta de respuestas, ese mismo año (2018) el concejal de Ushuaia Juan Manuel Romano advirtió que “la falta de planificación y obras en cuanto al crecimiento y sistema de tratamiento y disposición del relleno derivaron en la grave situación actual”.
“Es necesario constatar que el desborde de celdas no ponga en riesgo la salud, el medio ambiente y el perfil paisajístico de la ciudad”, remarcó en aquel entonces el edil.
Además, ante una clara situación de desborde, Romano realizó una presentación para la intervención del basurero de Ushuaia que incluía la reducción del volumen de los residuos, la optimización del uso del espacio y la prolongación de la vida útil del relleno.
El relleno sanitario de Ushuaia, un foco de contaminación que no para de crecer
El basural de Ushuaia es un foco de contaminación que pese a las precauciones de aislamiento que han adoptado, pone en peligro el entorno.
En él, una cantera realiza lavado de áridos, lo que aporta sedimentos en suspensión a tan solo 500 m de la desembocadura del Río Olivia con el Canal Beagle.
Consecuencias del crecimiento del basural de Ushuaia en la fauna
Para el año 2019, la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre y organización no gubernamental Wildlife Conservation Society (WCS) emitió un alarmante informe en el que aseguró que el crecimiento del relleno sanitario de Ushuaia tenía consecuencias directas en la fauna de las islas del Canal Beagle.
“Cerca del 100% de los nidos de cormoranes y gaviotas están armados con basura e incluso encontramos gaviotas incubando lamparitas de luz como huevos“, expuso en ese entonces la ONG.
Además, señalaron que “las colonias más alejadas, como las de las Islas Becasses, a 70 km de Ushuaia, tienen el mismo problema pero en menor medida: menos del 1% de los nidos contienen basura“.
