RADAR EN TOLHUIN. Dachary celebró la decisión nacional de desmantelarlo
El secretario provincial d Malvinas comentó sobre el desmantelamiento de radar operado por empresa británica en Tolhuin. Destacó la importancia de la política de defensa y propiedad estatal en desarrollos estratégicos.
Andrés Dachary, secretario provincial de Malvinas y Asuntos Internacionales, se pronunció sobre la reciente evolución en torno al radar operado por una empresa de capitales británicos en Tolhuin, un tema que generó una singular controversia. El radar fue inicialmente cancelado por el Ministerio de Defensa, pero su operación continuó, lo que condujo a la Jefatura de Gabinete de la Nación a decidir su desmantelamiento total.
Dachary valoró la decisión tomada por la Jefatura de Gabinete y destacó la solicitud realizada por el gobernador y veteranos de guerra para abordar este asunto. Hizo referencia al diagnóstico previo del Ministerio de Defensa que calificaba al radar como una amenaza a la seguridad nacional y a los intereses soberanos sobre Malvinas: “Por cualquiera de las dos razones era suficiente para que esto no tenga razón de ser en nuestra provincia”, indicó en el programa Línea Directa, por FM Master’s.
El secretario provincial subrayó la importancia de la cancelación definitiva por parte de la Jefatura de Gabinete a través de la subsecretaría del área de comunicaciones. Sin embargo, planteó la necesidad de revisar ciertos aspectos, ya que las resoluciones oficiales a menudo tienen un formato de “visto y considerando”, que incluye elementos objetivos y subjetivos.
Dachary señaló que el componente británico en la conformación societaria y la capacidad dual de la tecnología utilizada en el radar plantean interrogantes sobre la posibilidad de que otras empresas con diferentes capitales puedan operar un sistema similar. En este sentido, argumentó que desarrollos de esta naturaleza, que podrían brindar información estratégica para sistemas de defensa, deberían estar en manos del Estado.
El funcionario hizo hincapié en la necesidad de revisar este aspecto, y mencionó una sugerencia en la nota del Ministerio de Defensa que insta a la Jefatura de Gabinete a intervenir si se otorgan autorizaciones contrarias a las políticas de defensa. Dachary opinó que los ministerios no deberían poder actuar en contra de las disposiciones de estas políticas.
También expresó que la cancelación del radar, aunque esperada, es compleja de explicar al mundo debido a la serie de autorizaciones previas. Destacó que la decisión de desmantelamiento, aunque lógica, surge con argumentos que podrían haber estado presentes desde el inicio del proceso.
En cuanto a las acciones a seguir, el secretario de Malvinas explicó que se notificará a la empresa sobre la cancelación definitiva por parte de la Jefatura de Gabinete, y que el organismo provincial solicitará un plan de desarme. Si la empresa no cumple con esta resolución, podría enfrentar procesos judiciales.
La situación ahora se centra en cómo se llevará a cabo el desarme del radar, aunque Dachary advirtió que la decisión recaerá en los empresarios y actores involucrados en la empresa británica. Además, puntualizó que, debido a las características denunciadas por el Ministerio de Defensa, no se autorizará la operación de este tipo de sistemas en ninguna parte del país.
