El abogado de la ex legisladora Amanda Del Corro confirmó ayer que trabaja en el escrito de apelación contra la resolución del juez de instrucción 3 de Ushuaia, Federico Vidal, que rechazó por inexistencia de delito la denuncia formulada por Del Corro contra el actual legislador Emmanuel Trentino, por violencia de género.
En declaraciones a Radio Nacional Ushuaia, Santamaría dijo que fue notificado de la decisión judicial “el pasado jueves” y que el contenido del fallo es “similar en sus argumentos” al dictamen que había formulado el fiscal Mayor de la ciudad, Eduardo Urquiza.
A grandes rasgos, el pronunciamiento judicial revelado en la víspera por Noticia de Tapa, determina que Trentino no cometió ningún delito durante el incidente que sostuvo con la ex ministra de Educación provincial el sábado 16 de octubre, en el interior de un local partidario.
“Básicamente interpreta, con los mismos argumentos del fiscal, que se trató de una discusión o altercado perteneciente al ámbito laboral. Y no de un delito”, agregó el letrado.
En ese sentido, explicó que se encuentra trabajando en el recurso para revertir la medida que cursará ante la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones de Ushuaia.
Incluso adelantó que para ello tendrá en cuenta un reciente antecedente del Superior Tribunal de Justicia en el que se define que en casos como estos debe tener preponderancia la credibilidad otorgada a la denunciante, al menos para darle curso a la denuncia.
Santamaría señaló que aunque existan elementos “objetivos” para clasificar un hecho como una amenaza, también hay que tener en cuenta el aspecto “subjetivo”, es decir si una persona que recibe determinado improperio “se siente o no amenazada”.
El abogado anticipó que si la Cámara revierte el fallo, el juez Vidal debería ser apartado del caso porque “ya emitió opinión”.
La ex asesora de Trentino en la Legislatura denunció que el pasado 16 de octubre, cerca de las 11 de la mañana y luego de una reunión de trabajo en una sede partidaria de Forja en Ushuaia, el legislador la increpó en el sector de la cocina, donde coincidieron a solas.
En ese lugar, la dirigente sostiene que fue “arrinconada” por el legislador, quien según su relato le pegó “tres golpes a la puerta pasando la mano muy cerca de mi cara”, mientras “me gritaba improperios y me llenaba la cara de saliva”.
En esa situación, también le habría dicho a la mujer: “Tocame y te cago a trompadas”.
Tras la denuncia judicial de estos hechos, el fiscal Urquiza desistió de formular un requerimiento de instrucción, y calificó lo acontecido como un conflicto “extra penal” que podría tener “reproches morales o jurídicos de otro orden”, como una “injuria laboral”.
Al resolver el caso, el juez Vidal argumentó, en primer término, que “el pedido de desestimación de la denuncia formulado por el Ministerio Público Fiscal, es vinculante para el juzgador y determina la imposibilidad de dar inicio a la instrucción sumarial”.
Sin embargo, utilizando sus facultades de control de la legalidad del dictamen fiscal, el magistrado opinó también sobre el fondo de la cuestión.
En ese sentido, entendió que los argumentos del fiscal “resultan razonables” y que “no es posible colegir que Trentino haya incurrido en una conducta típica” penal.