PREOCUPANTE. Tierra del Fuego lidera, en proporción, el ranking nacional de femicidios

El promedio en todo el país es de 0,8 femicidios al año cada 100 mil mujeres. En Tierra del Fuego, se cometen 2,2 muertes en el mismo lapso. Buenos Aires encabeza en la cantidad, en términos absolutos.

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Victoria Aguirre, vocera nacional del observatorio Mumalá, organización que monitorea el índice de femicidios en Argentina, reveló que Tierra del Fuego ocupa el primer lugar entre todas las provincias del país en el triste ranking de cantidad de muertes de mujeres de forma violenta y en contexto de género, por supuesto que observando la proporción de habitantes. 

El observatorio federal elabora un informe mensual al respecto que, en el corte de registro al 19 de noviembre último, arroja un total de 349 muertes directas en lo que va del año, una muerte violenta de mujeres, trans o travestis, cada 22 horas en la Argentina.

Además, Aguirre aclaró que hay 49 muertes violentas que están en proceso de investigación, por ejemplo, aguardando resultados de autopsias y peritajes, para poder confirmar si cuadran dentro del universo objeto de la medición. “Nuestra fuente de información son fuentes secundarias, medios gráficos y digitales, redes en territorio. Muchas veces nos enteramos porque estamos en el lugar donde ocurren y esa noticia por ahí no sale en los medios” explicó.

En el caso puntual de Tierra del Fuego, Victoria detalló que “a la fecha de hoy hay dos femicidios” en términos anuales. Inmediatamente se encargó de aclarar que la tasa se verifica conforme al censo poblacional de la cantidad de mujeres residentes en cada provincia. “En este contexto, en la tasa nacional hablamos del 0,8 de femicidios cada 100 mil mujeres, y en Tierra del Fuego hablamos de 2,2. La tasa es altísima con relación al promedio de Argentina”.

La provincia donde mayor cantidad absoluta de femicidios se constató, es Buenos Aires, en directa relación con la inmensa cantidad de habitantes. 

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Tierra del Fuego lidera, en proporción, el ranking nacional de femicidios. (Ph: Chaco día por día)

El trabajo que se hace desde Mumalá se califica de responsable y exhaustivo. La caracterización de cada uno de los sucesos, busca disparar el análisis de dónde están las fallas y los aspectos a mejorar.

En esos términos, Aguirre no expresó muchas esperanzas sobre la situación actual: “No hay ideas innovadoras, no hay cambios radicales. Falta decisión política y presupuesto, es así de simple” graficó.

Alertó sobre la inmediata necesidad de trabajar en prevención. Al respecto, consignó el registro de 377 casos de intento de femicidio, “personas que están luchando por su vida en un hospital o en sus casas, donde el agresor dejó de agredir pensando que la había matado”.

Advirtió una total ausencia de políticas públicas conducentes a terminar con la violencia, que trabaje en la prevención con un adecuado presupuesto: “Hoy el programa Acompañar es el único que está funcionando, entre muchas comillas, y tiene diez meses de demora, para una persona que sufre violencia de género” expuso a modo de ejemplo de la gravedad vigente.

Desde hace varios años, la organización presenta en el Congreso Nacional un proyecto de Ley que declara la emergencia por motivos de género, “porque necesitamos que el Estado lo ponga sobre la mesa. No tenemos datos oficiales, los datos oficiales son los nuestros, una organización federal de un montón de mujeres y compañeres que todos los días nos ponemos a contar las muertes en nuestro país por violencia de género”. Indefectiblemente uno y otro año el proyecto pierde sucesivamente el estado parlamentario, porque ningún legislador lo promueve.

Respecto de la implementación de la ley Micaela, informó que se viene implementando en todo el país, “pero todavía no hay un monitoreo de cuánto se ha avanzado. Es muy discrecional de los poderes cómo se va a aplicar esta ley Micaela” lamentó y ejemplificó con el caso de la seguridad, donde el curso se da en una plataforma virtual “sin una persona hablándole de lo que significa la violencia o los estereotipos a romper, las conductas a desarmar”.

Finalmente, Victoria Aguirre reclamó al Poder Judicial que “destrabe las denuncias cajoneadas y ponga más presupuesto en el acceso a medidas cautelares, pero efectivas. Conocemos muchas personas que hicieron la denuncia, se fueron con un hermoso papelito que le dice que su agresor no puede estar a 500 m de distancia… pero nadie lo controla”.