INTA USHUAIA. Continúan las capacitaciones durante todo el año
Katia Pohjola, referente del INTA en Ushuaia, dio detalles acerca de la continuidad de las actividades del prestigioso instituto. “Sostenemos las acciones vinculadas a un programa tan querido y arraigado a la comunidad como es el ProHuerta”. A pesar de su discontinuación el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria mantiene iniciativas de capacitación y ferias.
En palabras de Katia Pohjola, técnica y referente del INTA, “aunque se disolvió el programa Prohuerta, siguen muchas actividades vinculadas a los contenidos de ese programa que tanta llegada tenía a la gente”. Esta afirmación refleja el espíritu de continuidad y adaptación que caracteriza al INTA.
Las actividades del INTA abarcan desde ferias quincenales hasta talleres en centros de salud y educativos. Pohjola destaca que “cada dos semanas hay ferias las que también dan charlas y demás“, lo que evidencia el esfuerzo del INTA por mantener un contacto directo con la comunidad y promover la agricultura sustentable y la alimentación saludable.
La expansión y reestructuración del equipo del INTA han traído consigo nuevos retos y oportunidades. Según Pohjola, “el equipo se amplió el año pasado y pasó a otra jerarquía“. Esta transformación organizativa refleja el compromiso del INTA con la mejora continua y el fortalecimiento de sus capacidades para servir mejor a la comunidad.
Con una programación anual y frecuencia quincenal, las ferias del INTA ofrecen un espacio para la venta de productos locales, así como para la educación y el intercambio de conocimientos entre productores y consumidores. En palabras de la profesional, “lo que hicimos, por primera vez, fue programar toda la feria hasta el cierre. Se organizó junto al Cambio Rural, el frutihortícola y el avícola“, lo que demuestra el esfuerzo coordinado del INTA para ofrecer un evento integral y enriquecedor para la comunidad.
Además de las ferias, el INTA ha incursionado en la realización de talleres en centros de salud, con el objetivo de promover la producción de alimentos saludables y la participación activa de la comunidad en la mejora de su alimentación. Pohjola señala que “desde el año pasado se están haciendo acciones en los centros de salud. Algunos incluso tienen sus propios proyectos de huerta”.
Otro aspecto destacado es la colaboración entre el INTA y el Centro Educativo y de Formación Laboral Ushuaia (Ceflu), que ofrecen capacitación anual en producción hortícola para adultos. “Es un trayecto teórico práctico de dos cuatrimestres en los cuales las personas pasan por todas las estaciones del año viendo qué hay que hacer en la huerta y las prácticas las hacemos junto a los productores“, explicó la técnica del INTA.
