El cine y la farsa Política (Por Alejandro Rojo Vivot)
El cine en general y las comedias en particular, con asiduidad, se han ocupado magistralmente de desarrollar aspectos políticos como, por lo menos, algunos clásicos así lo demuestran.
Sigmund Freud expresó en su libro ¨El chiste y su relación con el inconsiente ¨ que “Comparando el pensamiento que parece creado en lo inconsciente con su rectificación, nace para nosotros la diferencia de gasto de la que surge el placer cómico. Un chiste que se sirve de este procedimiento intelectual como técnica y aparezca, por tanto, desatinado, puede, pues, actuar simultáneamente como cómico. De este modo, si no logramos hallar las huellas del chiste, siempre que quedará la historia cómica”.
En tal sentido, el humor político, a veces, se vale de la farsa para presentar risibles situaciones que, simbólicamente, subrayan aspectos que están ocultos o poco visibilizados.
Quizá el más grave error es interpretar linealmente una farsa pues, la inteligencia lo que ha construido y muestra, de alguna manera, es lo que no es.
ADENTRÁNDONOS
Los italianos, con frecuencia, ancestralmente aprendieron a reírse de sí mismos y de burlarse de la política y sus políticos, aunque al mismo tiempo reconociendo positivamente a los que dignificaron con su accionar la vida pública.
Los estudios de Cinecittà, inagurados en 1937 por el periodista y político Benito Amilcare Andrea Mussolini (1883-1945), acrecentaron notablemente el patrimonio cómico del humor político, muchas veces expuesto rayano al disparate y extremo absurdo, empleando la farsa como recurso frecuente.
UNA OBRA DE ANTOLOGÍA
“Che c’entriamo noi con la rivoluzione?” (¡Qué nos importa la revolución!) (1972), protagonizada por Vittorio Gassman, (1922-2000), Paolo Villaggio (1932-2017) y, entre otros, Riccardo Garrone (1926-2016), con música del prolífero y genial Ennio Morricone (1928); la versión en español fue reducida suprimiendo 30 minutos.
Es el relato de las desventuras de un actor dramático que, junto a un cura párroco pueblerino, es obligado a participar activamente en una revolución iniciada el 20 de noviembre de 1910, en el convulsionado México de las primeras décadas del Siglo XX; más precisamente en los últimos días de Emiliano Zapata Salazar (1879–1919).
Es uno de los más acabados ejemplos del cine humorístico italiano de esa época. Es una obra principal para comprender a las producciones cinematográficas principales de hace cincuenta años.
Asimismo recordemos que, también en el Siglo XXI son varios los dictadores como, por ejemplo, el corrupto Joseph Kabila (1971), que gobernó a la República Democrática del Congo, desde enero de 2001 hasta 2019, habiendo sucedido a su padre el asesinado Laurent-Désiré Kabila (1939-2001), países con partidos únicos, nepotismo, vayamos por todo, pensamiento único donde el que piensa distinto es tildado de vendepatria, etcétera.
EL HUMOR EN ACCIÓN
La trama es simple: un grupo de revolucionarios obliga a un actor clásico extranjero, a la manera de los cómicos de la legua del Renacimiento y del Siglo de Oro Español, a ocultar las armas en el escenario, mientras representa “The Life and Death of King Richard III”, de William Shakespeare (1564-1616). Estrenada el 17 de noviembre de 1633, que también trata sobre la lucha por el poder entre distintas facciones.
Es una versión estereotipada del México rural donde el progreso económico estaba altamente concentrado, que incluye numerosas masacres, torturas, persecuciones, flagelaciones, corrupciones, etcétera.
Asimismo, es humorísticamente incluido en el relato el militar Giuseppe Peppino Garibaldi (1879–1950), nieto, sin tantas glorias salvo su apellido, del militar italiano Giuseppe Garibaldi (1807–1882).
En definitiva, es una película cómica europea presentando una porción de los procesos políticos de México que tanta repercusión significó en el desarrollo de ese país. ¿Es posible imaginarnos una obra humorística similar o equivalente referido a muchos principales hechos históricos de Argentina?
Vale la pena verla y así adentrarse a conocer una etapa del cine italiano que fue muy aclamado por el público y los críticos contemporáneos.
