El genial Pedro Saborido identificó a Ushuaia como una ciudad “hecha de ires y venires, de abandonos y regresos”. Y si hay arribos y partidas, hay mudanzas, donde uno encuentra pedazos de vida simbolizados en los recuerdos, que ni se explica por qué guardó.
Pedro Saborido, productor, escritor, guionista, sociólogo de pizzería y columnista en el programa Línea Directa de FM Master’s, esta semana más que sentenciar, se preguntó en relación con la identidad ushuaiense: “¿cuál es el porcentaje? ¿quizás el día de mañana sean más los NICs que los VEPs?”
Y fue aún más allá en sus interrogantes: “cuando voy ¿pienso en cuando me vuelva? ¿uno es una persona en tránsito?”
En ese sentido, Saborido y los entrevistadores identificaron algunas variables fuertes, como las familias cuyos hijos se van a trabajar o estudiar fuera de Tierra del Fuego, lo que provoca un desmembramiento. Más aún si los hijos se quedan a vivir y tienen nietos.
“Aparece la situación de ‘en tránsito’ en la cual uno puede imaginarse que uno vive en Ushuaia con una valija siempre dispuesta. Y entonces aparecerá otra decisión, y el que se va y el que se queda y uno mismo pasa por ahí. Me quedaré, me iré. Aquel que se fue ¿lo trato de traidor? ¿me duele que se vuelva?”.
También aparece, con la edad, la restricción propia de ir creciendo, donde perciben que “es una ciudad donde se empieza a ver que, en determinados momentos se van, los que se jubilan se van” según redundó Saborido.
“¿Es un por ahora Ushuaia?” desafió luego con un nuevo interrogante. Que se completa con la duda de si, el que vuelve a su terruño “¿se vuelve a acostumbrar o no se acostumbra? y otra vez es como eterno”.
Un caso muy particular se planteó luego en la columna, el de chicos, jóvenes, nacidos en Ushuaia, que se sienten identificados con el lugar de nacimiento de sus padres, “y sienten que también está de paso. Es una ciudad hecha de ires y venires, de abandonos y regresos” definió magistralmente el entrevistado.
Sin dudas, lo más interesante de la charla fue el planteo que Pedro Saborido propuso para la semana próxima, musicalización incluida en dos canciones sucesivas: “Es un tema muy uruguayo el que estamos planteando. Hay un famoso tema de Jaime Ross “Uruguayos a donde fueron a parar”, y hay otro tema que se llama “Adiós Miguel”, de Leo Maslíah, que habla precisamente de esto, del irse y el quedarse”.
La reflexión que promete abordar, parte de la suposición de que, quien se va de Ushuaia, es visto como un traidor: “Es interesante, Ushuaia es un lugar a donde se va, pero también un lugar para irse después. Está el destino de llegar, el destino de armar y el destino de irse. Uno, cuando vive siempre en el mismo lugar, no se da cuenta de muchas cosas que hizo, porque las sigue haciendo”.
Luego, con las mudanzas, se destapan otros asuntos, a los cuales Pedro Saborido no le esquivó en sus agudas apreciaciones: “cuando uno se muda y va y viene, la mudanza ya va marcando pedazos de vida, e incluso el hecho de mudarse es revisar la vida, porque uno empieza a abrir cajones, y dice, ‘uy, mirá, la garantía de una videocasetera Noblex’. Empiezan a aparecer cosas, una cantidad de cosas que, ¿en qué momento yo dije que esto era importante? ¿por qué si era tan importante hace quince años que no lo veo?”.
Aparecen fotos, “álbumes de tamaño pasaporte, con el nylon adentro. Y que no la volviste a ver porque ahora te la pasas mirando celulares” aportó, además. Sigue la revisión y aparecen unos lentes “que hace veintidós años que no usas, con una patilla rota porque pensabas que ibas a arreglarla. Y no la arreglaste nunca y quedo ahí”.
Prometedora la próxima semana la intervención del genial Pedro Saborido, analizando la identidad de los habitantes de la ciudad de Ushuaia desde su muy particular perspectiva.