Para Requejado, la Carta Orgánica no debe estar “viciada de política”
El candidato en primer término de Juntos por el Cambio, aspira a una Carta Orgánica despojada de los vicios y malos hábitos de la política de coyuntura. Por eso, remarca su origen en la actividad privada como argumento para sus votantes.
Ramiro Requejado, empresario gastronómico, directivo de la cámara de comercio, representante del rugby de Ushuaia, sin experiencia partidaria ni filiación política alguna, participará por primera vez en la vida pública local como candidato en primer término de convencional estatuyente para la reforma de la Carta Orgánica municipal, en el espacio de coalición Juntos por el Cambio.
Entrevistado en el programa Noticia de Tapa Radio, por FM Espectáculo, el propietario de Tante Sara rescató su trayectoria como dirigente de entidades del ámbito privado, como plafón para presentarse ahora en una contienda política: “Sin el paso por asociaciones intermedias no me hubiera decidido. Estos lugares me ayudaron a ganar confianza, a entender y aprender muchísimo, a construir liderazgo, a trabajar para algo que no es específicamente lo de uno”.
Requejado repasó su paso sobre todo por asociaciones intermedias, de representación de sectores a los que pertenece. Así, enumeró “mi club que me formó, la Unión de Rugby que siento que también me formó, representando al seleccionado de mi provincia jugando. La cámara de comercio, la agencia, que es un lugar increíble donde el privado tiene la posibilidad de trabajar con el sector público”.
Con respecto a su decisión de aceptar la invitación para formar parte de Juntos por el Cambio, contrariamente a anteriores ofertas de participación que desechó, manifestó que, en este caso, “trabajar en la carta Orgánica de la ciudad es trabajar en las normas que van a regir en próximos 50 o 100 años. A mí eso sí me genera un compromiso enorme, una responsabilidad que me está generando adrenalina”.
Requejado señaló como un punto favorable que, en su caso, aportar en la reforma de la norma madre de la ciudad proviniendo del sector privado y no de la política tradicional: “Si se va abrir la Carta Orgánica -y no quiero hablar en contra de la política- no tiene que estar muy viciada de política. Nada. Son normas hacia el futuro para toda la sociedad, no para la política. Considero que tengo criterio, buena fe, valores con los cuales me han criado, sentido común. Hoy estoy trabajando y aprendiendo, leyendo la Carta Orgánica. Entendiendo de qué se trata porque quiero hacerlo, si me toca, de la mejor manera posible”.
Profundizando en una suerte de posicionamiento “antipolítico” como candidato, el postulante remarcó que “claramente no me mueven intenciones políticas inmediatas, sino todo lo contrario. Creo que voy a aportar desde la visión de ciudad que tengo, que tenemos en la lista y que tenemos en mucha gente a la cual representamos”.
“Yo no me meto acá en contra de nadie” dijo, y reconoció no estar de acuerdo con “abrir” permanentemente las constituciones, municipales, provinciales o nacional. “Creo que hay muchas cosas en la Carta que no se pusieron en práctica. No sé cuáles son las intenciones de modificarlas, no hay una explicación clara de lo que se quiere modificar, de lo que se busca”, se quejó.
El candidato insistió en su perfil apolítico e instó a “hacer fuerza para que esté la mayor cantidad de gente independiente del ruido de la política actual, que sería un error. Nos dieron un lugar preponderante con gente que no estamos metidos en la política cotidiana, y que podemos aportar desde este lado”.
Finalmente, señaló que su objetivo es “tratar de trabajar en una carta orgánica mirando hacia el futuro porque entiendo que no se tiene que volver a abrir en 4 años” y puntualmente se declaró a favor del cumplimiento de los mandatos en tiempo y forma, y en contra de la perpetuidad en el poder y del aumento del número de concejales: “Queremos que sea una Carta Orgánica para la gente, y no para la política”.
