Recuperación de la Bahía Encerrada: dos lobos marinos ingresaron al espejo de agua
Dos Lobos marinos juguetearon dentro de las aguas de la Bahía Encerrada de Ushuaia durante la mañana del sábado 26 de junio, lo que muestra una mejora sustancial en la calidad del agua del sector.
Los lobos marinos de uno y dos pelos son vistos frecuentemente en las aguas de la Bahía de Ushuaia, las cercanías de Bahía Golondrina y de las playas del sector Oeste de la ciudad. La mayor cantidad de observaciones desde tierra se producen en la zona de playa larga, aunque en las navegaciones a los archipiélagos de las islas del Canal Beagle son los momentos de mayor cantidad de acercamientos.
El ingreso a las aguas de la Bahía Encerrada es una novedad dentro de los últimos 30 años, ya que el sector estuvo fuertemente afectado por el volcamiento indiscriminado de aguas cloacales sin tratamiento por más de una década.
Esta situación provocó que la Asociación Participación Ciudadana presente una acción judicial de protección de interés colectivos, donde fue condenada el Gobierno Provincial y, como tercero, el Municipio de Ushuaia en septiembre de 2014.
La Justicia civil, a cargo por entonces del juez Alejandro Fernández, dispuso la obligatoriedad de rehabilitar el sistema preexistente de colecta e impulsión de aguas post consumo y la inversión en un nuevo plan de obras. Particularmente al Municipio, las obras de remediación sobre la Bahía Encerrada.
Entre 2015 y 2019, durante las gestiones de la ex gobernadora Rosana Bertone y del primer mandato del actual intendente Walter Vuoto, se realizaron una serie importantes de nueva obras y reparaciones que implicó la mejora de la calidad de las aguas de la Bahía. Principalmente, la reparación del troncal sanitario costero (que evita los vuelcos en la Bahía Encerrada), la puesta en marcha y repotenciación de la estación elevadora ¨12 de octubre¨ y el mantenimiento permanente del sistema sanitario de la ciudad.
A su vez, se colectaron las aguas cloacales del Barrio Colombo (antes ingresaban directamente en las aguas del Arroyo Buena Esperanza), se reparó el sistema de colecta en la zona de las 200 Viviendas y la habilitación del refuerzo del colector sanitario Karukinka Norte, que contiene una parte considerable de las aguas de los barrios altos de la ciudad.
Por su parte, el Municipio de Ushuaia realizó una obra hidráulica sobre la pasarela Fique, que permitió la mejora de la circulación de la dinámica de las aguas entre la Bahía de Ushuaia y Bahía Encerrada.
A principios del año 2011, gracias los estudios de los biólogos Oscar Amín y Laura Comoglio, se detectaron niveles extraordinarios de contaminación de las aguas de la Bahía Encerrada por volcamientos de aguas sanitarios. Estos datos provocaron una serie de reacciones que derivaron posteriormente en la acción judicial que logró ¨Participación Ciudadana¨ ante la Justicia provincial.
Danza con lobos
El ingreso de los lobos marinos da cuenta de dos situaciones que se venían observando luego de la concreción del nuevo Plan de Obras de Remediación Ambiental. Por un lado, el análisis físico y bacteriológico bajo en forma exponencial, lo que implicó una mayor cantidad de oxigeno en las aguas del sector, junto con la disminución del aporte de aguas contaminadas.
El segundo factor fue la progresiva transparencia de las aguas de la Bahía Encerrada, pasando de una coloración oscura antes del inicio de las acciones de remediación a una observación similar a las condiciones de Bahía de Ushuaia en los últimos años. En la misma linea, el congelamiento de las aguas que no se observada desde las década del 80.
Esto implicó, entre otras mejoras, el ingreso de peces que habitan las aguas del Canal Beagle. El primer indicador fue la presencia de aves que se alimentan de los peces de la zona: el Martín Pescador, principalmente ubicado sobre la pasarela Fique y en los cordones rocosos de las costas que lindan con las vías de circulación que rodean a la Bahía.
Sin duda alguna, la presencia de los lobos marinos dentro de las aguas de la Bahía Encerrada con síntoma de franca mejora y recuperación, y abren las expectativas en un futuro de realizar actividades recreativas y deportivas dentro de las aguas de la Reserva Urbana de la ciudad.
Dependerá de la finalización de las obras de saneamiento sobre los sectores de incidencia sobre Bahía Encerrada, y, por sobre todo, de la constancia en el mantenimiento de los colectores sanitarios que se encuentran dentro de la cuenca que deben impulsar las aguas post consumo hacía la nueva Planta de Pretratamiento ¨Bahía Golondrina¨.
Sanear la Bahía Encerrada no fue una acción del pasado, sino que debe ser una responsabilidad del presente y futuro de la ciudad.
