USHUAIA: Preocupa la ubicación de la nueva central termoeléctrica

Hay preocupación en el barrio 640 viviendas, ya que todo parece indicar que el Gobierno pretende construirla en el predio fiscal frente al populoso barrio de Ushuaia. La iniciativa debería incluir estudio de impacto ambiental y audiencia pública, aunque, sobre eso, no asoman novedades.

Distintos sectores de la comunidad se encuentran con preocupación por la posible construcción, por parte del Gobierno provincial, de una nueva central termoeléctrica para Ushuaia. El endeudamiento fue autorizado por la Legislatura a fin de año, en un predio costero muy cercano al sector recreacional de Playa Larga, situado justo frente al populoso barrio 640 Viviendas.

Cabe señalar que para una instalación de las características y envergadura que se pretende, necesariamente se debe presentar un estudio de impacto ambiental y someter el asunto a una audiencia pública, sin que hasta el momento haya trascendido públicamente si se inició la tramitación administrativa relacionada con esto, ni con la afectación del predio para tal fin.

“Tiene que estar avanzado, si no, no tiene sentido pedir el crédito y si te lo dan y no tenés el terreno donde emplazar la central termoeléctrica, vas a recibir la plata y los plazos de devolución y para pagar intereses empiezan a correr a partir del primer desembolso” analizó no sin lógica por FM Master’s el periodista de El Diario del Fin del Mundo, Sandro Baschera.

El predio fiscal frente a las 640 Viviendas, donde se instaló oportunamente un horno pirolítico, ya cuenta con la autorización de la Legislatura de cambio de uso, ya que forma parte de una especie de reserva costera que hay en ese sector de Ushuaia. 

De hecho, hace algún tiempo atrás el Gobierno anunció que en ese mismo lugar pretendía llevar adelante la construcción de la nueva unidad de detención, lo que generó una fuerte reacción negativa de los vecinos de las 640.

La falta de información oficial después de la aprobación en la Legislatura, llama la atención. El estudio de impacto ambiental es una obligación, así como la audiencia pública.

Además, esa instancia sería una oportunidad para debatir y escuchar opiniones no solamente sobre una central termoeléctrica en la costa y casi en el centro de la ciudad, sino también de la pretendida construcción de la unidad carcelaria. La palabra de instituciones como el CADIC, la UNTDF o la asociación Mane’kenk, sería por demás interesante de escuchar.

Cierto es, por un lado, que es muy escaso el stock de terreno fiscal con que cuenta la provincia cerca del ejido urbano. No menos cierto que una central termoeléctrica genera ruido, impacto visual, gases -más los del horno pirolítico- en cercanías del relleno sanitario, lo que, todo junto, representa un combo difícil de imaginar.

En lo concreto, lo único visible y palpable es la autorización legislativa para tomar el crédito y cambiar de uso el predio. Frente a la invisibilidad de cualquier proceso de audiencia pública y estudio de impacto ambiental que la iniciativa sin dudas requiere.

En ese delicado contexto, Ushuaia necesita mejorar de manera urgente la capacidad de generación de energía eléctrica. “El parque de generación actual está en una crítica situación y no hay posibilidad alguna de satisfacer nueva demanda de energía de potenciales inversiones en el sector productivo o del crecimiento vegetativo de la población” razonó acertadamente Baschera.

Lo cual no deja de ser una brillante oportunidad para que las autoridades competentes encuentren y propongan una solución razonable y equilibrada entre la preservación ambiental y la necesidad de darle a Ushuaia esa mayor capacidad de generación energética.