El convencional estatuyente rescató el alto nivel de consenso y el respeto en los debates, realidad que contrastó con las presunciones de que la reelección del intendente era el único objetivo.
El presidente del Concejo Deliberante, en uso de licencia por estar ejerciendo como uno de los convencionales constituyentes que reforman de la Carta Orgánica de Ushuaia, se refirió en Noticia de Tapa Radio al avance en la Convención, de cara a la primera sesión ordinaria de este lunes, donde se abordaron 38 artículos recientemente evaluados y debatidos en la comisión temática que preside.
El convencional puso el acento en casos donde se ha tenido una mayoría de entre 7 y 9 votos para llegar a dictamen, en cambio en otros casos hubo dictámenes divididos. “Algunos temas fueron movilizadores, como el convenio municipal de empleo, extraer la figura de no agremiado de la Carta o el tema de taxis, que hubo movilización con ese tema” rescató.
En tal sentido, afirmó que se está optando, en los últimos debates, cuando las posiciones son irreconciliables pasar directamente a dictamen de mayoría y minoría, “eso va a acortar el tiempo de discusión, porque si no, discutíamos dos horas un dictamen, llegábamos abajo y nos encontrábamos que cambiaban de opinión, entonces se usaron dos horas tratando de convencer a un bloque o sector, y después fue imposible” relató Pino.
Destacó, eso sí, el nivel de consenso logrado hasta ahora en la mayoría de los importantes temas tratados, como transporte, régimen de empleo, gremial, ex combatientes o veterano de guerra cómo quedó ahora. “La segunda etapa son temas más políticos, departamentos Legislativo y Ejecutivo, que es lo que viene ya para la semana que viene”.
Entre esos asuntos a abordar por la Convención considerados más polémicos con escasa posibilidad de consensos, Juan Carlos Pino mencionó “el incremento del número de concejales, el tema de la vice intendencia, el balotage, son temas que son complicados, se van a generar discusiones y sin duda van a pasar como últimos de los temas porque son los más conflictivos, los que más polémica van a generar y sin duda no nos vamos a poner de acuerdo” aventuró.
Al margen, volvió a resaltar que pese a que hay “concepciones diferentes” lo que prima desde un principio “es el respeto que hay en la Convención. Es importante destacarlo, así como en la discusión muchas veces hay que poner un límite en el sentido del tiempo y llega un momento en que hay que pasar a otra instancia, eso es una madurez política que nos permite trabajar cada uno de los temas y saber que el otro piensa diferente, pero que hay un respeto mutuo”.
El convencional de Ushuaia Más analizó el cambio de percepción respecto de la Convención, generadora de entusiastas e interesantes debates, cuando previo a su inicio algunos sostenían que había que abrirla y cerrarla al día siguiente: “Muchos cambiaron de opinión. La reforma de la Carta Orgánica no era el tercer mandato, indudablemente, no es lo que muchos pensaban. Ahora cada convencional introduce modificaciones, un artículo abarca 15 o 20 incisos y todos los convencionales han modificado o introducido incisos dentro de ese articulado. Eso significa que la participación en general es de todos, aún de aquellos que no estaban de acuerdo y que decían que había que abrir y cerrar la constituyente en 3 días” apreció enfáticamente y hasta recordó que la reforma de la Carta Orgánica fue oportunamente judicializada.
Finalmente, Pino distinguió dos temas que considera centrales para debatir, dos grandes problemas de la ciudad cuyo debate es puesto en duda por no consistir estrictamente en las temáticas habilitadas para la discusión: “El problema habitacional, los alquileres, y el transporte, son dos grandes temas que están padeciendo los vecinos de Ushuaia. Esto tiene que ver con el turismo, que deja un pesito en cada negocio y desparrama el trabajo en gran escala. Es un problema que traemos de arrastre por décadas”.
A ambas problemáticas las vinculó con el crecimiento futuro de Ushuaia como ciudad eminentemente turística y que experimentará un vertiginoso crecimiento, como hasta ahora. “Cómo convivimos, nos adaptamos y llevamos adelante en función de esta realidad. La ciudad estaba preparada para 20000 viviendas, 20.000 servicios hoy eso se ha duplicado y tenemos los mismos servicios”.
Reconoció que puntualmente la temática no está en la discusión de la Carta Orgánica, pero sí el código de verificación o de planeamiento urbano “van a sufrir modificaciones, sin dudas, por una discusión que tiene que ver con altura o con tierra. Eso lo tenemos que discutir, algunos piensan que hay que dar a altura y otros pensamos que hay que ampliar el ejido urbano” definió finalmente Juan Carlos Pino.
