La titular de la comisaría de Género y Familia ofreció un panorama detallado sobre el elevado número de casos de violencia de género y abuso sexual que reciben la unidad policial especializada de Ushuaia.
En Ushuaia, la Comisaría de Género y Familia 2, bajo la dirección de la comisaria Noelia Mazelli, recibe en forma constante denuncias relacionadas con violencia de género y abuso sexual. En una reciente entrevista con FM Master’s, Mazelli expuso que la frecuencia y la gravedad de los casos que llegan a su oficina son un reflejo de una problemática persistente y preocupante en la comunidad local.
Mazelli describió el enfoque preventivo que se adopta en la comisaría para abordar tanto los incidentes que ocurren en la vía pública como aquellos que tienen lugar en el entorno privado, generalmente vinculados a las relaciones familiares. «Hay una situación de prevención con respecto a todo lo que pasa en la vía pública y en el entorno privado que tiene más que ver con las relaciones de familia y en algunos casos trasciende por los hechos de violencia, precisamente», señaló al respecto.
La comisaria explicó que la policía toma conocimiento de las situaciones de violencia de diversas maneras, siendo común la intervención a partir de la denuncia de algún vecino a través del 911 o la derivación de casos desde otras comisarías. «Tomamos conocimiento de distintas formas. En algunas oportunidades, algún vecino se comunica al 911, van en primera instancia a una comisaría de la jurisdicción y a raíz de lo que cuentan las partes, nos dan intervención a nosotros», explicó.
Una vez que las denuncias llegan a la Comisaría de Género, se inicia un procedimiento integral que incluye no solo la toma de la denuncia, sino también el traslado de la persona al hospital si presenta lesiones, donde son certificadas por el personal médico. Además, se brinda un abordaje interdisciplinario para atender las necesidades de las víctimas. «En esta comisaría se reciben las denuncias y se hace todo el resto del procedimiento. En caso que la persona tenga lesiones, se traslada al hospital donde se certifican esas lesiones y hay un abordaje también desde el personal de gabinete interdisciplinario», detalló Mazelli.
La comisaria subrayó que muchas personas se acercan directamente a la comisaría de género o a otras comisarías de la jurisdicción, y en estos casos, son trasladadas a la comisaría especializada para evitar la revictimización. «Hay muchas personas que también se acercan a la comisaría, o incluso las comisarías de jurisdicción porque les queda más cerca de la casa y son trasladadas después a las comisarías de género», mencionó, agregando que «por lo menos desde la policía se intenta no revictimizar. Entonces, ante la concurrencia de una persona en alguna comisaría de la jurisdicción, es mejor abordarlo directamente nosotros, entonces la trasladan y recibimos nosotros el trámite».
En cuanto al volumen de trabajo, destacó que la cantidad de denuncias puede variar significativamente de un día a otro. «Hay días que no viene nadie y hay días que se llena», afirmó. La comisaría que ella encabeza cubre una zona con menor densidad poblacional, lo que se refleja en un menor número de intervenciones en comparación con la Comisaría de Género 1, que abarca un área más densamente poblada. «La comisaría de Género 1 es la que tiene más cúmulo de trabajo por la densidad poblacional de la jurisdicción que le corresponde que es de Yaganes hasta la zona de Lapataia. Nosotros estamos de Yaganes hacia el Garibaldi y tenemos menos densidad poblacional y por eso tenemos menos intervenciones. Pero sí las hay, no es que no haya», aclaró.
Mazelli también reflexionó sobre la persistencia de la violencia familiar y la creciente disposición de las personas a buscar ayuda para poner fin a situaciones de violencia antes de que escalen a niveles más graves. «La violencia familiar siempre existió. No es algo nuevo. Sí es verdad que las personas tienen más la iniciativa de ponerle fin a la situación. Entonces se acercan a una comisaría o algún CAPS o algún otro lugar donde exista algún profesional y se inicia el proceso», observó.
En cuanto a los procesos judiciales, indicó que, aunque la cantidad de juicios puede fluctuar a lo largo del año, el número total de casos permanece constante. «Con respecto a los juicios, es verdad que hay épocas del año donde hay uno atrás de otro. Pero hay que tener en cuenta que todo forma parte de un proceso y de acuerdo a las disposiciones o lo que haya dentro de cada causa, se dispone después la llegada al juicio y eso es lo que da los números tan cercanos. Pero en sí la cantidad año a año no disminuye, es continua. Puede haber una variación de números, pero es mínima», puntualizó.
Finalmente, la comisaria Noelia Mazelli destacó que, en comparación con años anteriores, las personas están tomando medidas antes de que la violencia física se convierta en una realidad, lo que ha incrementado la cantidad de denuncias por violencia de género. «Años anteriores se tomaba conocimiento cuando los hechos eran muy relevantes. Hoy en día, las personas se acercan antes de llegar a la violencia física y poner fin a la relación o poner fin a ese momento», concluyó.
