El secretario político del municipio de Río Grande expresó su preocupación ante la posible disminución de $800 millones en la coparticipación que recibe de la provincia.
El secretario de Gobierno de la Municipalidad de Río Grande, Gastón Díaz, manifestó su inquietud frente a la eventual reducción de los recursos coparticipables que la provincia destina a la ciudad, estimada en 800 millones de pesos. Durante una entrevista con FM Master’s, subrayó la importancia de resolver este conflicto a través del diálogo entre las partes, destacando la necesidad de preservar la estabilidad financiera del municipio para continuar con su gestión de servicios y obras públicas.
“De ninguna manera quiero relativizar la discusión, porque se trata de recursos públicos, son recursos de los vecinos de Río Grande. Pero lo cierto es que, si esta resolución ministerial se ratifica en sede administrativa, lo que va a generar es que Río Grande tenga un detrimento de $800 millones en el reparto de coparticipación en comparación con los otros municipios”, sostuvo Díaz, poniendo en evidencia la magnitud del impacto que podría sufrir la ciudad en caso de concretarse la medida.
Díaz explicó que el municipio ya realizó un planteo formal en el ámbito administrativo y que espera una resolución por parte del gobierno provincial. No obstante, subrayó la importancia de mantener abiertos los canales de comunicación: “Todavía estamos en instancia administrativa, es una resolución del ministro de Economía, es decir, una resolución ministerial. Nosotros hicimos ya el planteo formal, obviamente seguimos apostando a resolverlo a través del diálogo, a través de la política”.
El eje de la controversia radica en la interpretación de los intereses generados por los recursos en resguardo, que el gobierno provincial considera no derivados de un esfuerzo fiscal, y, por lo tanto, no sujetos a coparticipación. Al respecto, Díaz señaló: “El reparto de la coparticipación entre los municipios tiene que ver con el esfuerzo fiscal que hacen los vecinos de cada una de las ciudades. La interpretación que hace el gobierno de la provincia, según esa resolución, es que dichos intereses no implican un esfuerzo fiscal y que por ende no pueden ser considerados como recursos”.
Desde el municipio se argumenta que el resguardo de los fondos busca proteger el valor de los recursos en un contexto económico volátil, donde la depreciación de la moneda es significativa. “Nosotros lo que entendemos, lo que planteamos y lo que hemos dejado planteado en el escrito, es que, al tener ese dinero en resguardo, es un cuidado de los recursos, justamente en un contexto económico donde la depreciación de las monedas de una semana a la otra, ni hablar de un mes al otro, es sumamente significativa”, afirmó Díaz, ejemplificando los tiempos administrativos que pueden generar demoras de hasta 60 días en la ejecución de fondos.
El secretario también puso de manifiesto las particularidades del municipio de Río Grande, que asume servicios no habituales en otras jurisdicciones, como agua y cloacas, y cuya recaudación directa representa apenas el 19% de su presupuesto. “Estamos dejando muy en claro que el municipio de Río Grande sólo el 19% de nuestro presupuesto proviene de recursos que percibimos de forma directa, a través de tasas e impuestos, y el resto es a través de la coparticipación nacional y provincial”, enfatizó.
Además, planteó dudas sobre la continuidad de la recaudación de impuestos como el automotor y el inmobiliario más allá del 31 de diciembre, fecha en que vence la suspensión de una ley que transfería esos recursos a la provincia.
Frente a este panorama, destacó la decisión del municipio de no trasladar mayores cargas tributarias a los vecinos: “Lo que nosotros percibimos en conceptos de tasas no es suficiente para cubrir ese servicio que estamos dando, como es el caso de agua y cloaca. Sin embargo, seguimos con este modelo apostando a no generar una mayor carga o un peso tributario en los vecinos de la ciudad”.
En un escenario de incertidumbre financiera, las declaraciones de Gastón Díaz reflejan la intención del municipio de priorizar el diálogo político para evitar un recorte que podría afectar gravemente las arcas de Río Grande, mientras se subraya la importancia de cuidar los recursos en un contexto económico adverso.