La multifacética Florencia Palumbo repasó su meteórico crecimiento desde que llegó a Tierra del Fuego, hace casi doce años. Jefa de prensa en NewSan, influencer, columnista, coach, podcaster y conductora de TV, reconoce que la pandemia fue puente para su desarrollo.
Licenciada en relaciones públicas especializada en marketing, jefa de prensa en NewSan, columnista en FM Master’s, conductora de televisión, coach, lleva adelante el podcast MotivARTE, crea contenidos y es exitosa Instagramer. Florencia Palumbo es todo lo que se propone.
Este miércoles, en lugar de su habitual columna radial, Florencia cumplió, acabadamente, el rol de invitada y entrevistada en el piso.
Vive en Tierra del Fuego desde el 2 de julio de 2011, el día que llegó a Ushuaia para trabajar, junto a Juan, su futuro marido, en Cerro Castor. Hasta el día anterior se había desempeñado en el área de marketing de Sony Ericsson, en la ciudad de Buenos Aires.
Su idea era pasar tres o cuatro temporadas en la isla. “Siempre dije que en 2015 me iba, era mi deadline. Pero la isla te atrapa, no te podés ir tan fácil. El día que empezó el Interski, el evento más importante por el cual habíamos decidido quedarnos que es el mundial de esquí, me llaman de NewSan” con una propuesta seductora que la convenció. Desde entonces hasta ahora está en la compañía, primero como sub jefa y ahora como jefa de prensa, aunque abarca bastante más que eso su trabajo.
El 2019 la encontró en plena diversificación de su actividad laboral. Pero 2020, el año que nunca olvidaremos, fue para Florencia su gran despertar: “yo soy una de las hijas de la pandemia, que me transformó y fue mi puentecito. Pasé de vivir en blanco y negro a color”.
Los comienzos de la nueva etapa comunicacional y tecnológica que abordó desde entonces, fue el podcast “Heroína Austral”, donde hablaba de la maternidad, la relación con los hijos. “Son procesos de descubrimiento. Cuando hago cursos o sesiones de coaching, me preguntan que no saben qué quieren, y tiene que ver con eso. Yo tuve una foto cabina, vendí ropa, empecé haciendo algo que creí que en ese momento me gustaba y después me di cuenta que me divertían otras cosas”.
En televisión, Carlos del Águila fue quien la convenció a probar suerte en el nuevo formato: “me dijo que yo tenía que hacer tele, yo fui a acompañar a Luis Bernal, me hizo una prueba de cámara y fue el gran motivador para que haga televisión. Una vez que descubrí la cámara, dije ‘esto es lo mío ¿dónde estaba todo este tiempo?”.
Se considera, y salta a la vista, una persona súper emprendedora. En cambio, no le gusta rotularse como instagramer o influencer, “sí creadora de contenidos. No siento que hay influencia en las personas, pero sí me pasa mucho con el podcast, las métricas me sorprendieron muchos este año y me doy cuenta con los mensajes”.
Su cuenta de Instagram tiene más de 11.000 seguidores, algo no tan común en Tierra del Fuego para una figura no política: “tengo una comunidad muy linda que a veces sorprende” reconoce. Admite que lo que más impacto tienen son los reels, y que a su cuenta “todavía le falta trabajo”.
Entre tanta actividad, diversa y voluminosa, encuentra como un problema a solucionar lo que llama “foco, me cuesta mucho hacer foco, quiero hacer muchas cosas y terminás haciendo poquitas”. Por eso su objetivo más importante para este año es “poder trabajar en mis focos, dónde pongo la energía para lograr lo que quiero”.
Algo de lo que quiere, y de lo que más le gustan, son las charlas, lo que precisamente en marzo hará en la provincia de Mendoza, como forma de ampliar su campo de acción.
Puesta en la dificultosa tarea de imaginar próximos desafíos, Florencia Palumbo honestamente confiesa que “disfruto mucho de NewSan, trabajo en equipo, aprendo un montón. Estoy haciendo lo que quiero realmente”.
Sólo imagina seguir apostando a lo que quiere. Llegan para ella los 40 –“la mejor edad de la mujer” – y se dispone a aprender y disfrutar, “a disfrutar más de mis hijos, de mi familia y seguir haciendo lo que me gusta. Siento que voy por buen camino, tengo tropiezos, pero tengo la vida que me gusta” definió finalmente la multifacética Florencia.
