María Giró, referente en los deportes invernales de Ushuaia, resaltó el valor de una propuesta inclusiva en los valles, donde se practican modalidades de nieve para atletas con discapacidad motora.
En los valles nevados de Ushuaia, una disciplina deportiva adaptada ha comenzado a destacar: el Paranordic, una modalidad que abarca diversas prácticas en la nieve, adaptadas para atletas y esquiadores con discapacidades motoras. Este proyecto, impulsado por referentes locales comprometidos, se proyecta como un evento de creciente relevancia internacional, con una participación cada vez más amplia y diversa.
María Giró, una de las principales figuras detrás de esta iniciativa y referente del centro invernal Tierra Mayor, destacó en FM Master’s la importancia de este tipo de eventos en una región como Ushuaia, donde, según sus palabras, «es un asombro, sobre todo para muchos de los que viven en Ushuaia, que por ahí estamos en otra realidad y no vemos tanto de cerca este tipo de eventos».
La inclusión de deportistas con discapacidades motoras en competencias sobre nieve no solo representa un avance en términos de accesibilidad, sino que también pone en valor el esfuerzo, la dedicación y la capacidad de superación de estos atletas.
El evento contó con la participación de veinte atletas de China, dos de El Salvador -quienes, además de su experiencia en parasurf, están incursionando en el esquí de fondo-, tres atletas de Brasil, y los competidores locales Nicolás Lima y Omar Lorenzo. Giró expresó su entusiasmo por la diversidad de participantes, señalando que «tuvimos de todo, atletas sentados, tanto hombres como mujeres, atletas de pie, que son los que tienen por ahí más comprometida la parte superior del cuerpo, con falta de los dos brazos, de uno, medio, deslizarse en las pistas». La variedad en las discapacidades motoras representadas en la competencia demuestra la adaptabilidad del Paranordic a diferentes necesidades, lo que subraya el carácter inclusivo del evento.
Un caso que llamó particularmente la atención fue el de una atleta china con discapacidad visual parcial, quien, a pesar de sus limitaciones, participó con la ayuda de un guía. Giró describió esta experiencia como «fantástica», resaltando la capacidad de la deportista para superar obstáculos en un entorno tan desafiante como el de los valles nevados de Ushuaia.
La organización de este evento no estuvo exenta de dificultades. Según Giró, desde el año pasado se intentó realizar la competencia, pero la falta de nieve en junio obligó a suspenderla. Sin embargo, el éxito de la reciente edición ha generado expectativas positivas para el futuro. «Es un evento que queremos repetir todos los años», afirmó María, quien también destacó la buena recepción por parte de los participantes y el potencial de la competencia para atraer a más equipos en el futuro. La semana previa de entrenamiento y la semana posterior de permanencia en la región han permitido a los atletas familiarizarse con el terreno y mejorar su rendimiento.
Además, explicó que la competencia de Paranordic se combina con eventos tradicionales como la Marcha Blanca y la Ushuaia Loppet, lo que lo convierte en uno de los pocos lugares del mundo donde esquiadores convencionales y atletas con discapacidad motriz compiten juntos. «Así que se va a largar en masa, van a largar todo juntos el domingo, los 20 kilómetros y por último el lunes que tenemos el sprint, que es una carrera muy corta, muy explosiva, muy temprano en la mañana. La idea es hacerlo todos los años», concluyó.
Este tipo de eventos no solo visibilizan las capacidades y talentos de los atletas con discapacidades, sino que también refuerzan el papel de Ushuaia como un destino clave para los deportes de invierno inclusivos. Con la voluntad de organizarlo anualmente, el Paranordic podría consolidarse como una cita ineludible en el calendario deportivo, atrayendo a competidores y espectadores de todo el mundo a los encantadores valles de Ushuaia.
