Abril Reboredo, estudiante avanzada de Biología y miembro del Consejo Superior de la UNTDF, relató lo vivido en la jornada del martes con la multitudinaria marcha que tuvo lugar en Ushuaia, así como en todo el país, de defensa de la educación pública y gratuita.
En una jornada marcada por una masiva movilización en defensa de la educación pública y gratuita en todo el país, Abril Reboredo, estudiante de Biología, militante estudiantil y miembro del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF), compartió sus impresiones sobre la abrumadora respuesta de la comunidad educativa y los desafíos que enfrenta la institución.
«Esperábamos que asistiera mucha gente, pero fue demasiado», expresó Reboredo en FM Master’s al referirse a la multitudinaria marcha que tuvo lugar en Ushuaia. «Sí esperábamos que asistiera mucha gente, pero fue demasiado y nos llena de orgullo ver a tanta gente que participa en defensa de la educación pública», agregó.
La estudiante destacó la importancia de la educación como «la base de todo» y subrayó la necesidad de poder manifestarse libremente, sin temor a represalias. «Poder marchar libremente y que no haya represión. Nosotros decíamos, si estuviéramos en Buenos Aires, estaríamos mirando para todos lados, con miedo, a ver si nos va a pasar algo», comentó.
La marcha, que partió desde la facultad a las 15:30 en Ushuaia, recorrió diversas calles de la ciudad, distribuyendo folletos y conversando con los transeúntes. «Nos centralizamos en la plaza de Malvinas y desde ahí volvimos todos juntos hacia la Universidad», detalló Reboredo.
Sin embargo, la abrumadora participación superó las expectativas de los organizadores, quienes se vieron obligados a improvisar el cierre del evento. «No nos esperábamos tanta gente. Dijimos de hacer un cierre central en la universidad ya planificado, pero hubo tanta gente que lo hicimos al aire libre y mucha gente quedó en la calle», relató la estudiante.
Reboredo también compartió su experiencia personal como estudiante de Biología en su último año, para graficar el estado de la educación universitaria pública. «Para terminar, necesitaba ciertos compuestos para hacer el análisis y no había. Y no había presupuesto para comprar uno. Por lo tanto, tampoco había para avanzar y terminar la carrera. Soy un caso en un millón», lamentó.
La situación en la UNTDF es descripta por Reboredo como crítica, con graves carencias de insumos básicos que afectan tanto a la docencia como a la investigación. «Los laboratorios no pueden llevar a cabo clases normales, la investigación de los docentes tampoco puede avanzar, los estudiantes no pueden recibirse», afirmó.
El presupuesto asignado a la universidad es considerado insuficiente, especialmente frente a una inflación del 280%. «En marzo, supuestamente, nos iban a enviar un 70% más, pero aún no llegó. Siguen pasando los días y cada vez está siendo más difícil», señaló Reboredo. Además, destacó que tanto docentes como no docentes han perdido el 35% de su poder adquisitivo en los últimos tres meses.
Ante esta situación, Abril Reboredo aseguró que la comunidad educativa de la UNTDF continuará en pie de lucha, exigiendo un mayor financiamiento que garantice el acceso a una educación pública y de calidad.
