Lo confirmó el director del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, Alberto Seufferheld, en virtud de que el incendio ya no se expande territorialmente. La propia extinción del fuego a partir de ahora se realizará con el recurso humano y material de la provincia.
La autoridad nacional de manejo de fuego confirmó que el incendio en cercanías de la localidad de Tolhuin se encuentra efectivamente contenido, es decir circunscripto a un solo sector sin que se expanda. Brigadistas locales se encargarán de las tareas de apagado.
“El primer objetivo es detenerlo, actualmente está contenido, dejó de crecer. Lo que sigue es tener todo el perímetro del borde del incendio con trabajo hecho y asegurar esa detención” afirmó el director por FM Master’s.
Por lo tanto, el aporte aéreo y terrestre del servicio nacional, cuya principal misión es actuar en los momentos más activos del incendio para generar la detención y el trabajo de control, “una vez definido este estado, se empieza a sacar recurso, porque tiene que estar preparado para ir a reforzar otro incendio grande que surja en el resto del país” manifestó confirmando así el retiro de los brigadistas nacionales, ya que “las tareas de extinción y de control son locales”.
Mientras que las aeronaves, en principio, permanecerán por algún tiempo más dado que “es un lugar inhóspito, y como suele suceder mucho en el Delta, hay que trasladar gente, en aquel caso al otro lado de las islas. Queda el equipo aéreo para ir generando ese cruce, ese transporte” aseveró Seufferheld.
La etapa de control y extinción propiamente, consiste en apagar “los fuegos, los humos que se ven dentro del quemado, que no se siga quemando para que sus espacios sean semilleros de producción”, para la eventual recuperación del bosque.
De tal modo, dio por confirmado que el fuego, desde hace varios días, “ya no crece en superficie, toda la actividad que se ve es dentro del perímetro, en algunas partes bastante lejos del perímetro”. Destacó la importancia de atacar esos fuegos más con un objetivo de conservación, para que queden esas “islas con vegetación para poder tener semilleros” según se explayó.
El funcionario dio cuenta de dos importantes incendios declarados en el Norte del país, uno en la provincia de Córdoba y otro más reciente en La Pampa: “todos los días hay focos nuevos que los grupos provinciales los atacan, en un día o dos los detienen. Y si duran más, si los recursos propios son sobrepasados, piden asistencia regional o nacional”.
Como opinan todos sus colegas, estos eventos van a ser cada vez más recurrentes a raíz del notable cambio climático: “tenemos que empezar a pensar en distintas metodologías de planificación. Más allá de robustecer los equipos de primera respuesta, hay que tener un trabajo de concientización y de cambio de prácticas del uso del fuego como herramienta. En estas condiciones, cuatro años de sequías sin tener fortalecidos los sistemas, cualquier incendio toma velocidad de propagación rápidamente” describió a continuación.
En cuanto a la situación de ahora en más, Alberto Seufferheld consideró que “van a seguir surgiendo humos, hay demasiado material grueso, es un bosque que tiene mucho tronco en el suelo, eso se va quemando muy lento y también hay muchos fuegos subterráneos”. Por esa razón, el trabajo que se está haciendo ahora “muy bien desde la provincia, es la observación, detección de humo, e ir a liquidar ese humo, un trabajo casi quirúrgico” señaló finalmente.