Juan Pablo De Luca, responsable de RGA Activa, destacó el crecimiento de la producción de pollos frescos impulsada por el municipio de Río Grande, que ahora se comercializa en las tres ciudades fueguinas.
La iniciativa de producción avícola del municipio de Río Grande ha experimentado un notable crecimiento, logrando distribuir su oferta de pollos frescos más allá de los límites de la ciudad. Bajo la administración de la empresa estatal municipal RGA Activa, entidad presidida por el economista Juan Pablo De Luca, la propuesta ha generado un impacto positivo tanto en la economía local como en la provincia de Tierra del Fuego. En declaraciones a FM Master’s, De Luca resaltó la importancia de esta expansión y su contribución al mercado regional.
El funcionario, quien encabeza esta sociedad municipal que gestiona distintas marcas de alimentos, subrayó el alcance provincial que ha tenido esta iniciativa. “Este año tuvimos una helada muy importante en términos de los tomates que incluso están bajo cubierta, pero se vieron afectados igual. Estamos pensando escalar también la producción de tomates, así como hicimos con pollos que, efectivamente, nos está yendo bastante bien en toda la provincia”, afirmó, aludiendo a los desafíos climáticos que afectan otras producciones locales y destacando el éxito alcanzado con la producción avícola.
Actualmente, los pollos frescos de Río Grande se distribuyen en diversos puntos de venta a lo largo de la provincia. Como en Tolhuin, por ejemplo, que se pueden encontrar en la carnicería de Julio, frente a la plaza cívica. “Tenemos muy buena aceptación de parte de todos los vecinos y vecinas de Tolhuin”, destacó De Luca.
También detalló la presencia del producto en la ciudad de Río Grande. “En Río Grande tenemos el punto de venta propio que queda en el Paseo del Canto del Viento, con horario corrido de martes a domingos”, indicó. Además, los pollos frescos están disponibles en diversas carnicerías y pollerías de la ciudad.
La distribución en Ushuaia ha sido posible gracias a un convenio con la carnicería Trelew, que ha facilitado la logística, aspecto crucial en la expansión del proyecto. “Hoy nos está facilitando la logística y eso para esto que estamos recién arrancando, así lo estamos viabilizando y nos está yendo bastante bien”, aseguró De Luca, evidenciando los desafíos logísticos en una provincia con características geográficas y climáticas complejas.
En cuanto a la comercialización, De Luca destacó la importancia de garantizar una oferta continua de pollos frescos en las góndolas de los comercios locales. “Lo que planificamos es una oferta continua en góndola. Pero después la ejecución a veces puede fallar”, reconoció, subrayando que, a pesar de contratiempos, los productos se encuentran disponibles en varios puntos clave, tanto en Río Grande como en Ushuaia.
Asimismo, defendió el precio del producto, estableciéndolo en $4.200 el kilo, y aclaró que es un error comparar el pollo fresco con el pollo congelado, ya que el primero ofrece un mayor rendimiento y calidad: “Este pollo no es congelado, es fresco. Todos los pollos congelados que vienen se les inyecta líquido y nosotros no le inyectamos líquido, tampoco conservantes”.
El proyecto avícola en Río Grande es fruto de una colaboración público-privada. De Luca destacó la alianza con la Misión Salesiana, que cuenta con instalaciones que han sido acondicionadas gracias al aporte municipal. “Nosotros le estamos poniendo a punto, ya hace más de dos años, que cuesta, el proceso de gestión, el equipamiento, la organización, la logística, los proveedores, la comercialización”, detalló, haciendo hincapié en el trabajo constante y en la evolución del proyecto.
Además, la empresa Mirgor es hoy socio clave en la logística y la provisión de alimentos para la producción, lo que ha permitido optimizar el proceso. “Ahora estamos produciendo de la mano también no solamente de la Misión Salesiana sino de la empresa Mirgor, que es nuestro socio en la participación de las operaciones”.
La producción de pollos en Río Grande también cuenta con el respaldo de acuerdos con otras instituciones, como la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), que brinda asistencia técnica para las máquinas incubadoras que aún no han sido puestas en funcionamiento. Estos acuerdos, según De Luca, son fundamentales para asegurar la continuidad y expansión del proyecto. “Tenemos otros acuerdos, por ejemplo, con la UTN, que nos está dando una asistencia técnica para las máquinas incubadoras”, explicó.
El éxito de la producción municipal no solo se refleja en la calidad del producto, sino también en la respuesta positiva de los comerciantes locales. “Los comercios locales que se acercaron sobre todo son los que valoran lo que es un producto de calidad y un producto local”, subrayó Juan Pablo De Luca, destacando el compromiso de los comercios fueguinos con la producción regional y la calidad de los alimentos que ofrecen a los consumidores.
En definitiva, la producción de pollos frescos en Río Grande se ha convertido en un ejemplo de cómo una gestión municipal puede generar iniciativas sostenibles y exitosas en el sector alimentario, logrando impactar positivamente en la economía local y en la calidad de vida de los habitantes de toda la provincia.
