Lo informó la máxima autoridad fueguina en Manejo de Fuego. Tal denominación técnica antecedente al estadio de “circunscripto”, próximo a lograrse si continúan las condiciones. La siguiente y última etapa es la de “controlado”.
El director provincial de Manejo de Fuegos, Pablo Paredes, sostuvo que la definición que corresponde al actual estado de situación en el incendio de la reserva Corazón de la Isla, es que el fuego se encuentra “contenido”. Eso implica que hay muchos lugares inestables que pueden reactivarse en algún sector.
“Por el momento los seis sectores definidos están contenidos, se están haciendo los trabajos en línea apoyados con medios aéreos y equipos de bombeo de agua” describió Paredes.
La nomenclatura intermedia antes de llegar al ansiado fuego “controlado”, es la de “circunscripto, cuando ya se pueden hacer las tareas en todo el perímetro del incendio. Podemos decir, por suerte, que falta muy poco para eso, gracias al trabajo del personal en línea día a día” aventuró el funcionario.
Explicó luego que la particularidad de este incendio la marcó la climatología, “en particular las condiciones que genera el área, donde las tres masas de agua importante, los tres lagos, generan turbulencias muy propias de ese sector”.
Este miércoles, una nube sobre la zona provocó una leve y continua llovizna, “que por un lado hace que la vegetación circundante al incendio este húmeda, pero por el otro nos complica la tarea con medios aéreos, porque la visibilidad es muy baja”.
Consultado sobre el tiempo que se calcula para poder afirmar que el incendio está controlado, Paredes prefirió transmitir que “estamos todos trabajando para eso”. Y aprovechó para pedir enfáticamente a la población y a quienes nos visitan, “que no hagan fuego, las condiciones de peligrosidad son extremas”.
En otro orden de cosas, indicó que el trabajo del combate contra el fuego, arduo y muy cansador, requiere de un recambio de personal “para que la gente vaya descansando y no se desgasten. Las características del evento van mandando las frecuencias del recambio, posiblemente cada 15 días, como se hizo esta primera vez. Normalmente es así, pero depende de la evolución del evento es cómo se va trabajando”.
Mencionó la importancia de contar con lo que llamó “herramientas paralelas al trabajo principal”, lo que hace cada hombre en la línea de fuego, que son los helicópteros y aviones hidrantes. Describió que su función es la de colaborar en la tarea de los brigadistas, en tanto cada descarga de los medios aéreos genera mejores condiciones para que la persona en el terreno pueda hacer el control de cada punto caliente.