Coparticipación: Los intendentes están que arden con Melella
Reclaman al ejecutivo provincial más de 1.000 millones de pesos en concepto de coparticipación atrasada.
El incremento de la deuda por falta de pago de las transferencias de coparticipación volvió a caldear el ambiente entre provincia y municipios.
Principalmente los intendentes Martín Pérez y Walter Vuoto vienen reclamando desde 2020 por los permanentes atrasos que tiene el gobierno provincial en transferir los fondos que les corresponde a las ciudades en concepto de coparticipación nacional.
La misma tensión se produce con las asistencias extraordinarias que manda la Nación para paliar la crisis sanitaria, y que la Provincia no estaría enviando a los municipios. El fastidio se centraliza en que ambas ciudades tienen fuertes equipos de salud, y están trabajando desde el inicio de la pandemia en la desinfección de espacios públicos, remodelación de edificios para asistir a pacientes con covid y han reforzado sus equipos profesionales médicos para contribuir a paliar los efectos de la crisis.
Además, las ciudades han empezado a hisopar a la población con mucha mayor eficacia que los turnos que otorga el sistema de atención a través del número de atención 107, pero no están recibiendo recursos para afrontar los gastos en prestaciones de salud que están realizando y esto resiente los presupuestos internos de los municipios.
Con tono de fuerte reclamo, en las últimas semanas se produjeron declaraciones por parte del intendente riograndense Martín Pérez, del jefe comunal capitalino Walter Vuoto y de varios de sus funcionarios de primera línea. Mario Daniele, jefe de gabinete de Vuoto, trató en las últimas horas al gobierno de ser una institución a la cual ya no se le puede creer en los compromisos que asume. Usó el cuento infantil ¨Pedrito y el lobo ¨ para hablar del valor de la palabra que tiene la gestión del gobernador Gustavo Melella, y alertar sobre los efectos de asfixia económica de no pagar los fondos de coparticipación en tiempo y forma.
Es una tensión que ira escalando en la medida en que la Provincia no envíe los recursos y que ha generado históricos conflictos entre gobernadores e intendentes.
El conflicto entre el nivel provincial y municipal se soluciona automáticamente cuando la gestión Melella dejé de producir atrasos de pago hacía las gestiones Vuoto, Harrigton y Pérez, ya que permite que las ciudades normalicen sus obligaciones para con los servicios cotidianos que prestan.
