Fuerte repercusión en redes sociales tras el cierre de las piletas y el uso del natatorio privado del Sport Club para las actividades del CAAD; nadadores, entrenadores y familiares expresan su frustración.
La comunidad deportiva de Ushuaia enfrenta un momento crítico tras el cierre indefinido del Natatorio Héroes de Malvinas. Con problemas de mantenimiento no resueltos durante los últimos años, los nadadores y usuarios habituales de las piletas quedan sin un lugar para practicar, afectando tanto a deportistas como a usuarios recreativos y de rehabilitación.
Desde hace cinco meses, las piletas del natatorio Héroes de Malvinas permanecen cerradas, y las expectativas no son alentadoras, con una posible reapertura para el segundo semestre del 2024 si las reparaciones necesarias se llevan a cabo según lo previsto.
En la cuenta de la red Instagram @nadadores_ushuaia se escribió ayer: ya son 5 años con idas y vueltas, hoy seguimos esperando una solución, una ves más nos dejan en un abandono total, una ves más nos llenan de mentiras y falsas promesas … han dejado de lado la importancia de lo que hace el agua a nuestros niños, pero no solo a ellos si no a todas esas personas que transitaban día a día está pileta(…)
Sin embargo, muchos usuarios cuestionan la falta de prioridad que el Municipio le dio al mantenimiento de estas instalaciones desde su inauguración en 2014, manteniendo a más de 1.000 usuarios diarios sin acceso a las piletas.
Los problemas de mantenimiento no son nuevos. Las deficiencias comenzaron hace cuatro años, coincidiendo con un prolongado cierre justificado inicialmente por la pandemia de Covid-19. Posteriormente, un mal trabajo de repintura llevó a una serie de interrupciones en el servicio, afectando el desarrollo de actividades deportivas, recreativas y de rehabilitación física.
La falta de respuestas en la gestión municipal ha impactado directamente en los jóvenes nadadores que formaban parte de las escuelas de iniciación y del equipo de natación que representaba a Ushuaia en el circuito patagónico. Muchos de estos deportistas también integraron equipos provinciales en los Juegos Evita, Araucanía y EPADE. Ahora, tras 20 años de esfuerzo y dedicación, el equipo de nadadores de Ushuaia se enfrenta a una inevitable desintegración.
El cierre de las piletas no solo frustra a los atletas, sino que también afecta a los entrenadores y familias comprometidas con la formación y el desarrollo deportivo de estos jóvenes. La natación es una disciplina que requiere entrenamientos constantes desde edades tempranas para dominar los cuatro estilos: crol, espalda, pecho y mariposa. La interrupción de este proceso no solo perjudica el rendimiento competitivo, sino también causa una profunda frustración en los nadadores.
En medio de esta crisis, el Sport Club de Ushuaia ha ofrecido su natatorio privado para que el Centro de Actividades Alternativas para Discapacitados (CAAD) pueda continuar con sus programas. Sin embargo, esta solución temporal no atiende las necesidades de la amplia comunidad de nadadores y usuarios del natatorio Héroes de Malvinas y de la histórica pileta municipal de Ushuaia, ubicada en el Centro Deportivo Municipal.
Las repercusiones en redes sociales no se han hecho esperar. Familiares y nadadores expresaron su descontento y desesperación por la situación, exigiendo respuestas y acciones concretas por parte de las autoridades municipales. La comunidad de Ushuaia, una vez más, se encuentra en una encrucijada, dependiendo de decisiones administrativas que, hasta ahora, han fallado en priorizar el bienestar y desarrollo de sus deportistas.