El senador fueguino valoró su notable exposición mediática en 2024, vinculándola a su posicionamiento en debates de impacto nacional y al interés generado por sus opiniones.
El senador nacional por Tierra del Fuego y referente de la Unión Cívica Radical, Pablo Blanco, destacó el notable incremento de su presencia en los principales medios de comunicación del país a lo largo del año 2024. Según señaló, este crecimiento mediático se relaciona con su participación en temas de alta repercusión y con la singularidad de sus posturas. Aunque admitió que no esperaba este nivel de atención, aseguró que la experiencia lo llevó a considerar con mayor profundidad su rol como legislador y el modo en que su voz representa los intereses de su provincia en el ámbito nacional.
“Para mí fue una sorpresa el interés que uno despertaba en algún tipo de apreciaciones, porque creo que debe ser por eso. O por la manera de prestarme a contestar lo que se me pregunte”, expresó Blanco por FM Master’s al referirse a su impacto mediático.
Reconoció además la importancia de su equipo de prensa, compuesto por personal de planta del Senado, cuyas conexiones fueron clave para facilitar su exposición pública. Sin embargo, subrayó que las posiciones que adoptó en temas sensibles y controversiales también jugaron un papel decisivo en su visibilidad.
El senador señaló que su presencia en los medios nacionales tuvo una repercusión directa en su provincia: “La verdad que repercute mucho porque cada vez que salgo en algún medio nacional, siempre recibo mensajes de acá. En eso fue muy positivo, una de las pocas cosas positivas que me deja mi experiencia en el Senado de la Nación porque la verdad que yo me imaginaba otra cosa. El Senado pensé que era otra cosa, realmente”.
Blanco también reflexionó sobre las tensiones generadas por la defensa de la Ley 19.640, que establece beneficios fiscales para Tierra del Fuego. “Por defender la Ley 19.640 es una eterna discusión que tengo, no solamente con (el jefe de uno de los bloques de diputados de la UCR) Rodrigo De Loredo, sino con muchos correligionarios y de otros partidos políticos que no entienden la problemática o no entienden lo que es Tierra del Fuego”, afirmó. En este sentido, reveló un cruce particular con De Loredo, a quien respondió: “Si yo calculo los beneficios que tiene la industria automotriz y la proporcionalidad del empleo que genera con lo que genera la industria en Tierra del Fuego, me parece que vos tenés que callarte la boca y pedir disculpas”.
El senador lamentó lo que denominó una “visión porteño centrista” que, a su juicio, limita el entendimiento del país a ciertas regiones como Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos y Mendoza, dejando de lado otras provincias como Tierra del Fuego.
Blanco repasó además algunos de los debates más relevantes y conflictivos que enfrentó en su rol legislativo. Mencionó la discusión sobre la Ley del Aborto como un ejemplo de intensidad y divisiones internas: “Fue una discusión bastante tensa y que estuvimos hasta último momento viendo cómo salía. La postura que yo sostenía no fue la que salió triunfante, pero fue una muy buena discusión, muy intensa, pero un tema muy chocante también”.
En ese aspecto, el senador expresó su desacuerdo con la idea de revisar nuevamente la legislación sobre el aborto que impulsa el oficialismo, algo que considera ya resuelto: “Me parece que es un tema que ya se ha discutido largamente y me parece que si queremos ser un país serio, no podemos estar cambiando ese tipo de leyes cada dos o tres años de acuerdo a las conveniencias políticas. Ojalá hubiéramos podido tener otro resultado, pero para mí ya es una situación saldada”.
Otro momento significativo fue su voto, junto a Martín Lousteau, en contra del resto del bloque radical durante el tratamiento del decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/23. Según Blanco, “era una postura que, si bien todos coincidían en que el decreto de necesidad de urgencia no era el camino adecuado, algunos creíamos que había que ya derogarlo, y otros sostenían que había que buscar otra alternativa. Eso fue también un momento de discusión sobre todo con los pares dentro del bloque”.
Con una combinación de reconocimiento mediático y profundos debates legislativos, Pablo Blanco concluye un año que, según sus propias palabras, dejó en evidencia tanto las dificultades del Senado como las complejidades de representar una provincia periférica en el escenario político nacional.