BALANCE COVID 19. A tres años del inicio de la pandemia en Tierra del Fuego
La ministra de Salud de la provincia, esbozó un panorama de cuál es la situación actual del COVID en Tierra del Fuego, tres años después de que se declarara la pandemia. Confirmó que el virus circula como cualquier otro de carácter respiratorio. Destacó el éxito de la vacunación, e instó a aplicarse nuevas dosis.
La Dra. Judith Di Giglio, ministra provincial de Salud, realizó un balance a tres años del inicio de la pandemia por COVID, que aún sigue siendo noticia nacional y provincialmente. Además habló de cómo la situación evolucionó a lo largo desde aquel marzo del año 2020, hasta hoy en día.
Recordó Di Giglio que lo vivido en los últimos tres años “dejó muchísimas enseñanzas”. Principalmente la funcionaria reconoció que, a raíz de la emergencia que significó la pandemia, todos los objetivos de gestión quedaron relegados en tanto se necesitó resolver la constante urgencia de la situación extraordinaria. En tal sentido mencionó que por estos días “estamos realizando muchísimos trabajos de estructura, de ministerios, de servicios, de infraestructura sanitaria”.
Denotó además que, en Ushuaia, junto con la pandemia se sufrió un incendio en el hospital, por lo que “ahora podemos ver cómo avanzan las obras próximas a inaugurar nuevos servicios dentro del hospital. Este es un momento en el cual, si bien hay mucho trabajo, el sistema de salud y el Ministerio de Salud está disfrutando mucho” relató con alivio.
La situación actual del virus COVID es que circula de la misma manera que otros virus respiratorios en nuestra provincia. En tal sentido, informó que Tierra del Fuego es parte de las redes de vigilancia epidemiológica del instituto Malbrán, que implica la realización de “un número determinado de hisopados por mes para monitorear cuáles son los virus que circulan y poder luego realizar la secuenciación genómica, que todo eso se hace en nuestra provincia, no solo de COVID sino de distintos virus respiratorios”.
Por el momento no predomina ningún tipo de virus respiratorio, y se comprueba la circulación de los que son habituales para esta época. La funcionaria enfatizó que “es fundamental que se acerquen a vacunar sobre todo los adultos mayores y las personas con indicación para la vacuna de la gripe”.
La evolución del virus a nivel mundial refleja el paso desde cuando durante mucho tiempo no había inmunidad y era un virus frente al cual toda la población mundial estaba susceptible, a la situación diferente de hoy, donde circula como otros virus respiratorios. Di Giglio contextualizó el actual panorama al distinguir que “ahora empiezan a descender las temperaturas, disminuye la ventilación de los ambientes, más el inicio de las clases, hace que aumente la circulación de virus respiratorios, no solo del coronavirus sino de todos los habituales”.
Con respecto al proceso de vacunación en Tierra del Fuego, lo calificó de “un orgullo cómo se organizó desde el Ministerio de Salud”. Destacó de aquellos inicios que la población fueguina “respetó de manera ordenada, dándole prioridad por grupo etario, arrancamos con los mayores de 75 años y así fue avanzando”.
Actualmente hay en la provincia múltiples puestos de vacunación en todos los centros de salud, que reciben a diario gente que continúa haciéndose vacunar, “sobre todo las personas que más nos interesan, mayores de 50 años o con una patología asociada”.
En términos de cobertura, los reportes dan cuenta que las primeras dos dosis que formaban parte del esquema fue muy amplia. Luego fueron descendiendo, “quizás dejó de ser una preocupación para la sociedad, cuesta mucho que las personas acerquen a vacunarse”.
Al día de hoy Tierra del Fuego cuenta con la vacuna bivalente, a la que se le incorporaron cepas de la variante Omicron que no estaban contempladas. Como se inicia la campaña principal, “utilizaremos también ese momento para poder colocar la vacuna bivalente para aquellas personas que no la tengan” reflejó.
Según finalmente explicó la ministra Judith Di Giglio, estudios científicos demostraron que con el pasar del tiempo disminuye la respuesta inmunitaria. Por eso, sobre todo en las personas mayores de 50 años, y en tanto por las temperaturas más bajas se relajan las medidas de prevención como la ventilación, “estamos aconsejando a todas aquellas personas que ya pasaron más de seis meses de la última dosis, independientemente del número de dosis que tengan puestas, acercarse a los centros de salud, que ofrecen horarios amplios de atención y puedan asesorarse por un enfermero que les indicará qué es lo que corresponde en base a cuántas dosis tiene cada persona”.
