Una afiliada denunció a la OSEF por incumplir la prestación de paciente diabética

Una Ley nacional y otra provincial obligan a las obras sociales a dar cobertura del 100% a pacientes diabéticos insulino dependientes. Pero la OSEF, inmersa en una crisis fulminante, no está cumpliendo con las necesidades de una afiliada.

Silvia Millat, jubilada docente, afiliada a la Obra Social del Estado Fueguino, denunció una grave situación que está pasando a raíz de una enfermedad que padece, en relación con la falta de prestaciones de parte de la entidad sanitaria estatal.

Silvia (66) padece diabetes. Pese a la vigencia de una Ley nacional y otra provincial que imponen a las obras sociales la cobertura del 100% en materia de diabetes, sobre todo para quienes sean, como Silvia, insulino dependientes, debe protagonizar poco menos que una odisea cada vez que necesita tiras de reactivos e insulina, indispensables para vivir, merced al desmanejo, ineptitud y desidia de parte de las autoridades actuales de la OSEF.

“Es un deterioro emocional y físico. Esto es de lo más perverso” graficó Millat la desesperante situación que le hacen pasar los responsables de la OSEF. En tal sentido, apuntó sobre la actual directiva: “Lamento que esté en la presidencia de la OSEF una mujer (Mariana Hruby) tan incompetente como la que está. pero sé que hay empleados que tienen toda la predisposición”.

“Hay una ley que no se está cumpliendo. Es mi salud y con mi salud no se mete nadie, ni el gobernador, ni la OSEF, ni nadie” cuestionó luego, y anunció que posiblemente instrumente la presentación de un recurso de amparo que la proteja.

Para una mayor comprensión de la inconcebible situación que le hacen afrontar cada vez que requiere los medicamentos e insumos que por Ley le corresponden, Silvia relató al detalle el peregrinaje al que se la somete: “No encontrás los remedios, tenés que ir de una punta a la otra, te das cuenta que una receta no sirve, no tengo auto, estamos a fin de mes… Lo que está haciendo el gobierno con nosotros es un maltrato absoluto. Doy fe. Me autorizaron una sola caja de tiras, yo me estoy atendiendo en el hospital con la doctora Ávalos, pero si no ¿dónde te hacen una receta rapidísimo? En la clínica. Seguimos alimentando la parte privada, pagándole a través de la OSEF a alguien que te haga una miserable receta”.

Silvia mencionó expresamente a un empleado de la obra social, de nombre Gustavo García, quien se comprometió personalmente a conseguirle, si obtiene la receta, insulina que tienen en stock en la farmacia de calle Alem.

“Se sabía que esto iba a pasar hace muchísimos años. Que ahora nos vengan a decir que gastamos más” evaluó la damnificada acerca del caos y el colapso al que llevaron las actuales autoridades a la OSEF. Finalmente apeló a las autoridades de Salud para que se responsabilicen por sus actos de gobierno: “Yo quisiera que den más la cara de la parte de Salud, que salgan y digan qué están haciendo”.