BAGAJE CULTURAL

¿NINGUNEO? (Por Alejandro Rojo Vivot)

Ene 17, 2025 | Cultura

Ushuaia, ciudad costera, bella, diversa, rica y continuamente agredida ambientalmente, a través de sus habitantes y visitantes continúa forjando un invalorable bagaje cultural.

zocalo 04

En el trajín diario hay muchas cuestiones recurrentes y otras que quedan veladas de manera ex profeso; ambas integran los valores culturales prevalentes contribuyendo a observar con detalle de que estamos hablando cuando hablamos de nosotros mismos.

¿DÓNDE QUEDÓ SU MEMORIA?

Orundellico (1815-1864), fue uno de los numerosos miembros del pueblo yagán o yámana que vivió en las proximidades de estas playas, creciendo en armonía en la Región de sus ancestros, cuando lejos estaban de estar ceñidas en las posteriores fronteras. En esa época no había diablos.

Principalmente, por lo menos, trabajaban empleando canoas adecuadas al mar que bien conocían y apreciaban muy particularmente; esas aguas fueron perdiendo terreno por el avance de rellenos de la civilización frecuentemente incivilizada.

En ese sentido, vale rememorar a un auténtico poblador originario cuyo recuerdo ha ido quedando en la memoria olvidada de muchos.

A tal punto que es más conocido por el caprichoso mote “Jemmy Button”, aduciendo arbitrariamente vaya a saber que condición o característica.

Recordemos que para los sajones el ancestral botton es botón, que en forma figurada significa algo pequeño de un conjunto grande: “bien vale un botón como muestra”.

Jemmy fue un nombre de pila sajón principalmente masculino, muy usual en siglos pasados que fue perdiendo frecuencia en su utilización.

Existe una isla Button, en el importante canal Murray (William Murray, político inglés), Cabo de Hornos, Chile.

Quizá, el joven arrancado de estas playas algún día tendrá con su nombre original su propia calle, avenida, plaza, etcétera, saliendo de la condena al ninguneo.

Orundellico sufrió indecibles barbaridades, pues su problema principal fue haber nacido en el Siglo XIX, con creencias propias y arraigada cosmovisión donde la libertad individual y el trabajo era altamente ponderados muy lejos de la acumulación per se inclusive dañándose así mismo, a otros, al ambiente, etcétera y al perverso pensamiento único.

En esos años los recién llegados buscaron imponer un idioma extraño como los recientes que pretendieron cambiar algunas letras, inventar palabras, mezclar verbos y sustantivos en aras de decisiones inconsultas y voluntaristas.

Ona con arco y flechas
¿NINGUNEO? (Por Alejandro Rojo Vivot) 5

ADEMÁS

Desde luego que incluimos a Yokcushlu (1821-1883) que sí tiene su propia calle en Ushuaia, aunque con su nombre ajeno: Fuegia Basket, por obra de la fantasía a esta niña de nueve años le fue endilgado ser como una canasta.

El joven Elleparu tampoco recibió la gracia de una plazoleta con su nombre ni con el anodino York Minster que lo remite irreverentemente a una ciudad y religión muy ajena a él.

ADEMÁS

Con dos décadas de tránsito por la vida otro de los secuestrados le reemplazaron el nombre original, que se perdió hasta ahora, con un recuerdo de un confuso hecho naviero: Boat Memory, falleciendo por viruela a los pocos días de haber desembarcado en la civilización.

Por lo menos en Ushuaia, cuando fue la Pandemia COVID-19, con cientos de decesos e ingentes pérdidas económicas, pocos rememoraron a Boat Memory; otra oportunidad desaprovechada, careciendo también del recuerdo a través la denominación de un espacio público relevante.

Así mismo, tengamos presente a los norteños vecinos selk’nam que, por lo menos, cuando son convertidos en el nombre de una calle se los denomina únicamente onas (hombres del norte) cuando bien podrían convivir las dos denominaciones, como en Estrasburgo que por las guerras imprimen en la misma placa el nombre en alemán y francés; sutil ironía.

En Ushuaia, la atribución exclusiva e indelegable de nominar es del Concejo Deliberante: “dar nombres a calles, avenidas, pasajes, plazas, paseos, barrios, edificios y cualquier otro sitio en general de dominio público o privado municipal. (…)”. (Carta Orgánica. Artículo 125, inciso 27).

Salvo algún atropello amañadamente exitoso.

Tapa La tierra del fuego
¿NINGUNEO? (Por Alejandro Rojo Vivot) 6

TAMBIÉN

La inversa de ningunear es reconocer, ni más ni menos.

Entonces, imaginemos un conjunto escultórico donde los cuatro jóvenes están presentes en la costa de Ushuaia, observando para siempre el bellísimo mar que los acogió, recordando el origen poblacional de esta comarca con gran riqueza cultural.

Podría ser confeccionado artísticamente con metales de llaves, picaportes, canillas, candados, etcétera, donados por muchos silentes entre tanta bulla desmedida.

Los cuatro podrían estar incluidos entre otros muchos que también quedaron a la vera de la Historia, de la Historia de Ushuaia y de la humanidad.

Seguramente, la simpleza y lo emotivo llamará la atención como la mítica “La Sirenita” que, con varios cientos de visitantes diarios, reposa al borde del mar de Copenhague en recuerdo de la fantasía y la literatura.

AL RESPECTO

Vale reiterar que ninguneo es el concepto para denominar a una situación de desprecio que, generalmente es cuando exprofeso se trata a una persona o hecho como si no existiera buscando anular sin argumentos de ningún tipo.

Ningunear lejos está de ser olvido o ignorancia, es la conducta consciente de desprecio.

Es dable recordar la contribución en este sentido del Premio Nobel de Literatura (1990), el mexicano Octavio Paz. (1914-1998). (El laberinto de la soledad. Fondo de Cultura Económica, México, 2000).

DOS MAGNÍFICAS CONTRIBUCIONES

La literatura de ficción también aportó a esta realidad a veces enmascarada.

Con deleite, vale la pena disponer, al menos, de quince minutos diarios para leerlas en forma completa en cualquier formato.

“Las montañas estaban lejos del mar y se alcanzaba la costa a través de las praderas. Desde la orilla se divisaban los lobos meciéndose en el oleaje. En los acantilados no cabía un pájaro más. Estos cormoranes tenían el sueño pesado y uno podía descogotarlos tranquilamente sin que los demás pestañearan. Algunos tenían el pico manchado de fruta y eran más sabrosos que cualquier otro pájaro. Generalmente dormían en lugares difíciles y había que descolgarse por una cuerda para cazarlos. Así resultaba imposible disponer de ambas manos y era preciso matarlos de una dentellada en el cogote”. (1)

(Últimas páginas. El rehén liberado volviendo a su hermosa Wulaia) “La Nancy levó anclas, las velas se desplegaron y el barco comenzó a describir un lento semicírculo.

Button seguía inmóvil, en la popa, mirando hacia donde yo estaba; cuando el barco puso proa al sur, repentinamente se quitó la camisa y el pantalón y los arrojó por la borda, hacia arriba. Las pequeñas manchas flamearon un segundo en el aire contra el cielo y cayeron al agua.

Desnudo, levantó el brazo y lo sostuvo en alto; su mano, arriba, separó los dedos.

Levanté mi brazo.

Recuperada su desnudez esencial, Button volvía al hondo sueño de la Tierra del Fuego, al viento polar, a la libertad de sus bosques, al invierno más antiguo del mundo, a las altas hogueras de la noche austral, a su patria.

No habría ‘posterior destino’ para el ‘desdichado indígena’. Ni para los suyos ni para nadie de su tierra porque, fatalmente, iban a sucumbir. Su destino y el de su pueblo estaban sellados. Ahora había diablo en el país de Omoy-Hume”. (2)

Sabato La Resistencia
¿NINGUNEO? (Por Alejandro Rojo Vivot) 7

2002

“El Municipio reconoce la preexistencia de los pueblos originarios de América, en especial los de esta tierra, y refleja el pluralismo étnico. Promueve la conservación y enriquecimiento de su patrimonio cultural, histórico, lingüístico, ritual y artístico, con los medios y espacios a su alcance”. (CO, Artículo 24°). Este texto no fue incluido en el debate de ninguna de las modificaciones parciales.

EN FIN

El extraordinario argentino Ernesto Sábato (1911-2011), Premio Cervantes (1984), escribió: “Como al desmoronarse los cimientos de una casa, las sociedades comienzan a precipitarse cuando sus mitos pierden toda su riqueza y su valor”. (3)

NOTA

Alejandro Rojo Vivot, contratado por organismos internacionales, en varias oportunidades, brindó conferencias y asistencias técnicas en México.

1) Belgrano Rawson, Eduardo. Fuegia. La Nación. Página 57. Buenos Aires, Argentina. Diciembre de 2001.

2) Iparraguirre, Sylvia. La tierra del fuego. Alfaguara. Quinta reimpresión. Páginas 282 y 293. Buenos Aires, Argentina. Abril de 2001.

3) Sábato, Ernesto. La resistencia. Seix Barral. 17ᵃ Edición. Página 60. Buenos Aires, Argentina. Abril de 2006.

Otras noticias

Quiénes fueron los ganadores de los Globos de Oro 2025

Quiénes fueron los ganadores de los Globos de Oro 2025

Entre lo más destacado de la entrega de premios estuvieron las películas “The Brutalist” y “Emilia Pérez”. Fernanda Torres se quedó con el galardón a mejor actriz de película dramática y Adrien Brody fue el mejor actor, también en drama. En esta nota, el listado completo de los ganadores.