El legislador analizó las primeras reuniones entre los legisladores y el Ejecutivo, señalando los sectores clave en la propuesta de gasto para el próximo año.
El legislador Juan Carlos Pino, integrante del Partido Justicialista de Tierra del Fuego, ofreció una visión detallada sobre los avances en las negociaciones por el presupuesto provincial 2025. Durante las últimas reuniones con funcionarios del Poder Ejecutivo, se discutieron los puntos neurálgicos del proyecto, donde se destacaron las inversiones en infraestructura y la urgencia de soluciones energéticas para las principales ciudades de la provincia.
Pino, por FM Master’s, subrayó el impacto de la situación económica nacional en las finanzas provinciales, explicando que el presupuesto presentado refleja un escenario ajustado. «Todos sabemos que la situación que atraviesa el país no es la mejor, por ende, a Tierra del Fuego le pasa exactamente lo mismo, teniendo en cuenta que desde el Ministerio de Economía han presentado un presupuesto ajustado para este año, pidiendo un endeudamiento de $20.000 millones para encarar obras y distintas actividades que va a llevar adelante la provincia para suplir los recortes que ha hecho el Gobierno nacional», indicó. Según detalló, este endeudamiento apunta a completar obras en curso, iniciar nuevos proyectos y asumir gastos que previamente eran financiados por Nación, como el fondo de incentivo docente.
En cuanto a la cuestión energética, el legislador destacó que la presentación de la Dirección Provincial de Energía (DPE) no ofreció respuestas satisfactorias a los problemas persistentes. «No hay una solución inmediata y esto ha quedado claro. Hoy se está brindando una capacidad entre 39 y 42 megas cuando la capacidad debiera ser de 56 megas. Esto compromete a la DPE, por una cuestión de energía, por una cuestión de que hemos tenido cortes durante todo el año», señaló.
También mencionó el impacto que estos cortes han tenido sobre la comunidad, con «innumerables quejas de vecinos, vecinas y comerciantes» y casos donde «algunos comercios han perdido mercaderías» debido a interrupciones prolongadas.
Entre los sectores más afectados, Pino destacó la situación crítica en el barrio Pipo y la zona suroeste de Ushuaia. «Hemos planteado algunas situaciones que se han dado respecto a esto en distintos sectores, por ejemplo, el sector del Pipo y toda la zona suroeste tiene problemas permanentemente y no hay capacidad de resolverlo rápidamente», expresó.
En este sentido, mencionó que la DPE estima requerir una inversión de más de 17 millones de dólares para abordar los problemas más urgentes, aunque aclaró que hasta que no se resuelva el problema relacionado con la planta Roll Royce y los motores antiguos de la planta ubicada en el barrio Bahía, los inconvenientes persistirán.
Respecto a la ciudad de Tolhuin, indicó que la capacidad energética ha llegado a su límite, lo que impide realizar nuevas conexiones a la red eléctrica. Sin embargo, adelantó que se planea la instalación de dos motores adicionales, lo que permitiría ampliar el acceso a más vecinos. «Una de las noticias que dieron es que van a colocar dos motores más, esto va a permitir que se pueda conectar muchos más vecinos en la ciudad de Tolhuin», comentó, aunque reconoció que las respuestas siguen siendo insuficientes.
Juan Carlos Pino destacó que estas problemáticas energéticas afectan transversalmente a la provincia y que será necesario un esfuerzo sostenido para superarlas.
Mientras tanto, las reuniones legislativas continúan en busca de consensos que permitan avanzar en la aprobación de un presupuesto capaz de atender las prioridades planteadas y brindar soluciones a las necesidades urgentes de la población.