La legisladora del Partido Justicialista cuestionó duramente al bloque Somos Fueguinos por su intento de derogar la Ley de convocatoria a la reforma. Instó a no tener miedo al diálogo, al debate y al trabajo conjunto.
En medio del intenso debate político que atraviesa la provincia, la legisladora Myriam Martínez, representante del Partido Justicialista, expresó su convicción sobre la necesidad de avanzar en la reforma de la Constitución provincial y fustigó al bloque Somos Fueguinos por su intento de derogar la Ley de convocatoria, subrayando la importancia del diálogo y el consenso en este proceso.
Según dijo Martínez e FM Master’s, las discrepancias en torno a la reforma constitucional parecen estar impulsadas por motivos políticos más que por consideraciones sustanciales. En sus propias palabras, «veo que solamente son cuestiones meramente políticas. Pueden ser egos personales que pueden existir entre diferentes referentes políticos».
La legisladora enfatizó la necesidad de abordar los numerosos artículos propuestos para la reforma y de discutirlos abiertamente, asegurando que ningún cambio se impondría sin debate previo.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de definir claramente en la Constitución las funciones entre los gobiernos provincial y municipales, con el objetivo de optimizar los recursos públicos: «Las funciones entre los gobiernos, de la provincia y los municipios, se superponen, hay muchas funciones que se superponen, van a quedar realmente bien limitadas para saber a cada uno qué función le corresponde. Obviamente para optimizar también los gastos».
En cuanto a las críticas hacia aquellos que proponen ideas diferentes, Martínez fue contundente al afirmar: «Esta cuestión de desmerecer que ‘cinco locos, seis locos, ocho locos’, habían escrito este proyecto, estas cuestiones que le faltan el respeto a quienes de alguna manera piensan diferente o tienen proyectos diferentes, no lo comparto, no es mi manera de trabajar y realmente molesta muchísimo».
Por otro lado, la legisladora recordó la experiencia pasada en la modificación de la Carta Magna municipal de Ushuaia, donde inicialmente muchos actores políticos se manifestaron en contra, pero luego participaron en el proceso de reforma. Este caso, según Martínez, demuestra la importancia de adaptar las normativas a los cambios que la sociedad necesita.
En conclusión, Miriam Martínez destacó la importancia del diálogo y el consenso en el proceso de reforma constitucional en Tierra del Fuego, instando a superar las diferencias políticas en aras del beneficio de la provincia.